Han transcurrido 19 años desde que nació Bryan Castillo, un joven imbabureño apasionado por el BMX y el arte audiovisual.

BMX es una modalidad acrobática del ciclismo cuyo origen se sitúa en California, Estados Unidos. Se considera deporte olímpico desde 2008. Esta disciplina consiste en recorrer una pista con diferentes rampas, las cuales otorgan ascendentes grados de dificultad a lo largo del ecorrido. Los pedalistas utilizan bicicletas sin cambios para facilitar las maniobras, no solo en el aire sino en el momento de tomar las cerradas curvas, en las que usualmente se presenta la mayor cantidad de caídas.

Por esta y otras características, a Bryan siempre le atrajo el BMX. Para él, más que un deporte, es una pasión que comparte con amigos.

A diario, Castillo dedica 3 horas a la práctica y utiliza su bicicleta para trasportarse a las diferentes actividades que realiza.

Las bicicletas son pequeñas y las ruedas tienen un diámetro de 20 pulgadas con manubrios bien grandes que facilitan la conducción.

Este deporte extremo forma parte de la cultura urbana. De hecho, el BMX-urbano es un tipo de BMX de estilo libre que comenzó a finales de los años setenta.

Durante esta época, los ciclistas de esta disciplina pasaron mucho tiempo sobre sus bicicletas en pistas de concreto para patinar en San Diego, California. En 1979, el primer equipo de BMX de estilo libre fue conocido como el BMX Action Trick Team.

Este tipo de deporte urbano involucra montar la bicicleta a través de obstáculos creados por el hombre, la mayoría de los cuales no están diseñados para las bicicletas, en primer lugar.

Algunos de estos obstáculos incluyen escaleras, pasamanos, cornisas y diseños arquitectónicos con formas inusuales. Incluso una simple acera puede ser utilizada.

En el lenguaje del BMX se conoce con el nombre de trucos a los saltos, giros y demás piruetas en el aire que sorprenden al público reunido alrededor de la pista.

¿Son ciclistas, acróbatas o amantes de las emociones fuertes? En realidad, son deportistas.

Al ver a Byron o algún otro de los especialistas en esta práctica, literalmente, dar vueltas se comprende por qué el BMX es considerado una modalidad acrobática del ciclismo. “Solo somos un grupo de amigos que hacemos lo que nos gusta y apasiona”, dice Bryan.  

Este joven ha competido en algunas ciudades del país, entre ellas Quito, Ambato y Riobamba y ha obtenido los primeros lugares en las competencias. Bryan Castillo es un estudiante que cursa el cuarto semestre de la carrera de Comunicación Social en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, con sede en Ibarra.

Bryan cuenta que, en esta carrera, encontró todo lo que le gusta; se siente identificado y realizado con la elección.

Asegura que a través de esta profesión puede promocionar el BMX y desarrollar productos comunicacionales para que más personas conozcan y valoren esta práctica.

En los semestres iniciales de su carrera recibió fotografía. Desde entonces se quedó totalmente enamorado de este arte, porque puede capturar momentos clave de este deporte. Con el transcurso del tiempo ha mejorado su técnica para fotografiar a los intrépidos ciclistas.

Como buen comunicador social le gusta la literatura, en especial los poemas de Pablo Neruda y los libros con temáticas psicológicas.

Ha practicado esta categoría de deporte extremo desde que era solo un niño, pero únicamente hace 3 años está más entregado a esta práctica. En realidad, para realizarlo solo necesita su bicicleta, una rampa o cualquier obstáculo para practicar las piruetas y acrobacias.

Actualmente, en el parque Cuidad Blanca de Ibarra, existe un espacio propicio para quienes desean practicar BMX. Es allí adonde Bryan acude. “Es como mi casa”, menciona.

El joven forma parte del grupo Paranoia Team. Para conocer a más amantes del BMX, Bryan y su grupo han realizado eventos y competencias, cuyo fin es contribuir a su difusión. Por el momento cuentan con  la ayuda de instituciones públicas que patrocinan los premios para las diferentes competencias.

Cuando Bryan habla del BXM sus ojos brillan. Dice que cuando conduce su bicicleta siente que “está más vivo que nunca”. Para Carlos Villegas, otro aficionado de este tipo de ciclismo, este es más que un deporte: “es una pasión”. Tiene 24 años y lo practica desde los 4. Asegura que puede combinar su deporte favorito con su trabajo.

Son muchos los jóvenes que practican deportes extremos en la ciudad. Bryan pide que se tome en cuenta a estos grupos también dentro de los planes recreacionales anuales, pues en Ecuador, quienes se han especializado en este deporte, saben que se trata de una disciplina de carácter abierto , ya que depende de los oponentes y sus acciones para adaptar las propias actuaciones.

Con relación a las cualidades físicas necesarias en BMX, esta disciplina se caracteriza por una salida potente, un pedaleo entre saltos y curvas lo más ágil posible y la mayor resistencia posible a estos esfuerzos máximos.

Es necesario considerar que los esfuerzos realizados por el deportista comienzan con una salida explosiva y máxima. (I)

DATOS

Por lo general, las competencias tienen el mismo formato que en el atletismo de pista: participan 8 ciclistas, cada uno por el carril que le han asignado aleatoriamente.

El circuito tiene una longitud de 350 a 500 metros. Son 3 mangas sin final, luego pasan a la siguiente ronda los 4 primeros clasificados hasta quedar 8 para formar una manga final.

Con el tiempo, este deporte se fue consolidando y traspasó fronteras. Llegó a nuestro país, donde los jóvenes se arriesgan diariamente realizando los saltos característicos.

Las bicicletas de bicicross son mucho más pequeñas que las convencionales y, sobre todo, más resistentes.

Suelen estar fabricadas en materiales muy livianos, como aluminio y acero cromado, y pueden costar más de $ 1.000. (I)