Su cabello rizado y abundante se convirtió en su principal distintivo. A la distancia, es fácil reconocer que se trata de Joselyn Espinales, futbolista de la selección femenina sub-20 que jugará el Campeonato Sudamericano de la categoría en el país. De cerca, es de fácil sonrisa. Mientras le hablan, no puede dejar de mostrar sus dientes y responde con soltura y alegría.

La número siete de la selección sub-20 es descomplicada fuera de la cancha, pero dentro de ella se transforma. Solo sonríe cuando anota un gol o cuando ha brindado una asistencia desde su posición de volante ofensiva.

La Tricolor se prepara para el debut en el torneo, pues el sábado jugará contra Argentina en el estadio Olímpico de Riobamba. Espinales será la capitana, designada por la entrenadora Vanessa Arauz, a lo largo del campeonato y ella solo puede sentirse honrada con la designación.

“Siento que capitán no es el que lleva la cinta, sino el que sabe liderar a su equipo, llevarlo por el buen camino. Haré mi mayor esfuerzo siempre por este equipo”, contó durante su estancia en la Casa de la Selección, antes del viaje a la capital de Chimborazo previsto para hoy.

Para ella, llevar la banda, no representará el simple hecho de usarla, de estar en el sorteo y fotografiarse con los árbitros en la mitad de la cancha. “Sé motivar al equipo, porque comprendo a todas las chicas. Ellas saben que no solo se juega con las piernas, sino también con la cabeza y debemos estar siempre enfocadas en nuestro objetivo, que es llegar al Mundial de Francia”.

Si las cosas no salen como ella espera en la cancha, no es de reprochar a sus compañeras en ese momento. Si tiene que hacerlo, lo hace puertas adentro y si ella yerra, se resguarda en su habitación para pasar el enojo.

Joselyn considera que la preparación ha sido exhaustiva para que los errores sean mínimos y que el camino sea idóneo para acceder a la Copa del Mundo, que sería la primera en esta categoría en la rama femenina.

La guayaquileña de 18 años juega desde los 15 en Unión Española de su ciudad. Es decir, que es bicampeona del fútbol ecuatoriano y es además titular en la plantilla.

Algo que le ha llenado mucho es poder compartir equipo con mundialistas. En Unión Española figuran futbolistas como Ingrid Rodríguez, Madelyn Riera e Irene Tobar, que jugaron el Mundial de Canadá 2015, el primero para una selección ecuatoriana.

“Me siento muy afortunada de estar con ellas. Yo trato de absorber todo lo que me dicen, porque siempre lo hacen de forma abierta. No puedo hablar de una en particular, porque las tres siempre nos dan consejos a las que ahora estamos en la selección nacional”, contó.

Ella y otras seis compañeras del equipo porteño se perdieron la definición del torneo el fin de semana que pasó, pero todo por estar de lleno en un objetivo mayor.

Aún mantiene en su memoria la actuación de la selección ecuatoriana en los Juegos Bolivarianos de Santa Marta, el año pasado. Allí fue titular en los cinco partidos, marcó un gol, pero sí lamentó que la Tricolor no haya logrado la presea dorada.

Volvió al país con la medalla de plata y además recibió una distinción individual del Comité Olímpico Ecuatoriano (COE), que la reconoció como una de las mejores deportistas nacionales en esa justa.

“A mi forma de ver era mejor realizar un reconocimiento al equipo, porque todas nos esforzamos por llegar hasta la final. Pero lo recibí con mucho agrado, porque dice mucho de mi juego y lo que traté de hacer por la selección”, señaló.

Ella también sueña con tener una oportunidad en el extranjero en algún momento y ve al sudamericano como una gran oportunidad para conseguirlo.

“Somos anfitrionas. En nuestra casa tenemos que hacernos sentir, pero no solo se trata de eso, sino de demostrar nuestra capacidad en la cancha y llegar a los primeros lugares”. (I)

Marín deja de ser técnico de Paraguay por no tener título
Apenas dos días después de ser presentado como director técnico de la Selección Femenina de Paraguay, el colombiano Vladimir Marín renunció al cargo tras conocerse que no posee título de entrenador profesional. Él mismo reconoció no haber culminado los estudios para asumir un cargo de esta naturaleza. Le faltan seis meses para recibirse.

Pese a ello, ya había entregado la lista de convocadas con las que trabajaría para afrontar la Copa América Femenina de la categoría absoluta, que se disputará en Chile del 4 al 22 del próximo abril. Sobre su salida, la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) no amplió la información, tal vez porque Marín explicó las razones de su dimisión en algunos medios de comunicación.

Con 38 años y retirado en 2017 de la actividad en el Sportivo Luqueño, el exdefensa dirigió a las paraguayas en algunas prácticas realizadas en la ciudad deportiva que la APF tiene en Ypané. La Copa América reunirá a las 10 selecciones sudamericanas; bregarán por los premios que otorga la competición: dos cupos y el repechaje para el Mundial Femenino Francia 2019, plazas a los Juegos Panamericanos Lima 2019 para los cuatro primeros y la clasificación del campeón y subcampeón a los Juegos Olímpicos Tokio 2020. (I)