Son momentos duros los que atravesamos actualmente. Estamos frente a una arremetida de la rancia oligarquía, conjuntada con los poderes imperialistas y una vasta cadena de medios que los apoyan para difundir sus mentiras. Es penoso ver las acciones que han realizado con el único fin de desestabilizar, mintiendo y engañando a las personas para que salgan a defender sus intereses. Ya lo han hecho muchas veces durante este Gobierno, han buscado cualquier pretexto para el desorden, con la esperanza de que regresemos a los modelos de extorsión, a la falta de educación, salud, igualdad, oportunidades, en fin, a la falta de atención a un pueblo que exigimos días mejores.
Han dicho que no tienen oportunidad para expresarse, y pasan despotricando todo el tiempo contra el Gobierno, con infames mentiras y altos grados de temeridad en sus acusaciones. Sus grandes ‘estrellas’ son los grandes oligarcas de este país, quienes al escuchar que deben aportar para la generación de oportunidades y una mayor equidad, se han enloquecido, acusando que se les está metiendo la mano al bolsillo y mintiendo a la gente que esto generará pobreza y que nunca más se podrá trabajar para dejar algo a nuestros hijos. ¡Tamaña mentira! No les conviene un gobierno que eduque a la gente, porque las generaciones educadas nunca más permitirán que exista tanta desigualdad y excesiva acumulación de riqueza en las familias que han heredado desde la Colonia, que han robado en los gobiernos neoliberales y que han conseguido sus grandes fortunas cobre la base de la explotación de sus trabajadores. Ya no podemos dejarnos engañar y que traten de regresarnos a ese pasado oscuro y siniestro, Ecuador ya cambió, y ese cambio pacífico, que lo dio Rafael Correa, no puede ser manchado con agresividad y enfrentamientos entre ecuatorianos.
Es hora de recordar lo que nos hicieron en el pasado y estar alerta de lo que quieren hacernos hoy en día, porque solo les interesa robarnos y despojarnos de la estabilidad y progreso que hemos alcanzado en estos 8 años de revolución. Debemos estar pendientes y defender este proceso que tanto bien ha hecho al país.
Vinicio Rodríguez
