Las relaciones bilaterales son necesarias para afianzar los vínculos históricos, la cooperación económica y la amistad entre los países.
Ecuador pasó de una pésima relación con Estados Unidos, a lo largo de una década, a una nueva etapa en la que hay una agenda amplia en diferentes temas de interés mutuo.

Por eso, ayer se desarrolló el III Diálogo Político Amplio Bilateral en Washington D.C, con representantes de los dos gobiernos.
En la presidencia de Lenín Moreno ambas naciones construyeron una sólida relación basada en los valores que comparten sobre democracia, seguridad, transparencia, desarrollo, lucha contra el narcotráfico, la delincuencia organizada y la corrupción.

En ese último encuentro pasaron revista a siete temas: uno de ellos es la responsabilidad compartida en la lucha contra el narcotráfico para aumentar la seguridad y la estabilidad en la región. Recordaron la firma del Memorando de entendimiento sobre el despliegue de oficiales federales aéreos de seguridad en vuelos entre el Ecuador y los Estados Unidos. También acordaron profundizar la cooperación bilateral en extradiciones y en combatir la trata de personas, que es un crimen contra los derechos humanos.

Para los dos países es importante fortalecer la democracia y la transparencia mediante el intercambio de información y capacitación en seguridad cibernética e identificación y lucha contra la desinformación. Reconocieron el valor la confianza y la seguridad en las redes inalámbricas de última generación y en ello trabajarán con otros gobiernos interesados en proteger sus tecnologías de información nacional y promover una cadena de suministros diversa y dinámica a nivel global.

Estados Unidos dio un espaldarazo a Ecuador por el “Proceso de Quito” para unir a otros países y dar respuestas a la crisis migratoria y de refugiados que afecta a Latinoamérica. EE.UU. apoyará las políticas de este país que facilitan el acceso de los ciudadanos venezolanos a servicios básicos que incluyen salud y educación.

En cooperación para el desarrollo recalcaron en la reapertura de la oficina de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), en Quito en noviembre de 2020. Recordaron el “Convenio de Asistencia para el Desarrollo” para facilitar inversiones sostenibles en las áreas de medio ambiente, energía y otros sectores generadores de ingresos.

Anunciaron que profundizarán la cooperación bilateral para aumentar el empoderamiento económico de las mujeres, que va de acuerdo con los objetivos de la Iniciativa de “Prosperidad y Desarrollo Global de la Mujer (W-GDP)”, que además contempla el programa “Academia para Mujeres Emprendedoras (AWE)”.

Reanudar y fortalecer las relaciones bilaterales con EE.UU. ha traído beneficios al país.