El primer avión que cruzó los Andes fue El Telégrafo (1920), bautizado así porque el entonces director de este Diario, José Abel Castillo, financió ese vuelo, con un valiente italiano: Elia Liut. El próximo 4 de noviembre será el centenario de ese acontecimiento.
Ayer, en el acto solemne de los 100 años de creación de la Aviación Nacional y Día de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), en la Base Aérea Mariscal Sucre, se mostró la aeronave que hizo esa hazaña.
El presidente Lenín Moreno agradeció a la institución por su trabajo sin descanso porque cumplió labores humanitarias durante la pandemia. Incluso se creó en Guayas una Zona de Seguridad Nacional, coordinada por las FF.AA. y lideraron la Fuerza de Tarea Conjunta Guayas para combatir el coronavirus y recoger de las casas y calles a las víctimas de la emergencia sanitaria.
31.646 militares laboraron en medio del dolor y la muerte, transportaron insumos médicos y alimentos a los más pobres. De ellos, 3.178 se contagiaron y 10 fallecieron.
El reconocimiento a los uniformados también fue por su apoyo en defensa de la institucionalidad del país, asediado por un intento de golpe de Estado en octubre de 2019. Ellos fueron secuestrados junto a periodistas y policías en esos días de caos vandálico y de violencia que vivió Ecuador, especialmente Quito.
El país ha pasado un difícil momento económico por los efectos de la pandemia y la ausencia de ahorros en la caja fiscal, allí habían $13.000 millones que la administración de Rafael Correa se gastó de manera irresponsable. Todos seguramente recuerdan que el exmandatario se refería a ese fondo como “ahorritos”. “Ahorritos” que servirían para atender las necesidades de salud de los ecuatorianos más pobres.
A pesar de ello, el Gobierno está optimista gracias a los recursos que llegan de los multilaterales y servirán para pagar $ 1.527 millones el IESS por el aporte del 40% del Ejecutivo; y $ 285 millones serán para las deudas con las empresas proveedoras del Estado.
El comandante General de la FAE, Mauricio Campuzano, resaltó la política de diálogo y de respeto a las personas y a las instituciones del Gobierno, así como su esfuerzo para aprobar la ejecución de proyectos prioritarios para esa institución: la adquisición de aviones de entrenamiento para los cadetes de la escuela de pilotos y helicópteros medianos para tareas de evacuación aero-médico, búsqueda y rescate. Esas aeronaves llegarán al país en los próximos meses y eso es el inicio de la recuperación de capacidades operativas de la Fuerza Aérea.