En el cierre de su informe a la Nación, el presidente Rafael Correa realizó un homenaje a los caídos en la sublevación policial del 30 de septiembre y dijo que "jamás serán olvidados". Reiteró que no dejará que estos hechos queden en la impunidad.

Tras la rendición de cuentas de sus ministros, Correa retomó su discurso para nombrar uno a uno a los fallecidos en aquel día "por defender la democracia y la revolución". Agradeció al grupo de seguridad presidencial y los elementos de las Fuerzas Armadas por los actos de heroismo.

Reconoció, además, a los miembros de grupos especiales de la Policía que se enfrentaron a sus compañeros, demostrando su lealtad.

El Jefe de Estado cuestionó el manejo que cierta prensa ha dado al tema. "Como el odio lleva a la irracionalidad y esta no tiene límites, hoy ciertos medios de comunicación en un vergonzoso espíritu de cuerpo (...) por defender a un periodista calumniador, pretenden demostrar que los pájaros dispararon a las escopetas, incluso la prensa corrupta ha llamado al rescate operativo político. Cuánta falta de respeto a los caídos y a los héroes que se jugaron la vida por defender la democracia", sostuvo.

" El 30 de septiembre es una realidad que no podemos permitir que se olvide y peor aún, que se repita", añadió al reiterar que "no dejaremos que la verdad sea conculcada, derrotada, que se mantenga reprimida en las manos de unos cuantos negociantes de la información".

"O cambiamos ahora compañeros la historia de nuestra América, o no la cambiamos nunca. Mientras yo sea presidente no permitiré la impunidad", subrayó.

Consulta popular

En el final de su intervención, Correa también se refirió a la consulta popular en la que el pueblo "dio un rotundo y soberano sí por la Patria".

Dijo que las preguntas causaron tanto miedo que concitaron la participación activa de la más grande coalición de fuerzas que gobierno alguno haya enfrentado.  "Desde la ultraderecha hasta la supuesta ultraizquierda, junto a los poderes de siempre: banca, medios de comunicación (...) pese a todo la victoria fue contundente", sostuvo.

 En ese sentido manifestó que se obtuvo medio millón de votos más que en la última elección de abril 2009, cerca de 7 puntos de ventaja, lo que representa más de 520 mil votos por pregunta.

Añadió que consultará al soberano "cuantas veces sean necesarias, incluso para ponerle a su consideración nuestras renuncias en caso que una oposición de la Asamblea haga imposible la gobernabilidad".

Explicó que gracias a la victoria en la consulta ahora se pueden atender de mejor manera las prioridades trazadas a final del 2010: seguridad ciudadana, reforma judicial y reforma del Estado, e impulsar más eficientemente la lucha contra la corrupción.

Sobre la libertad de expresión

En la primera parte de su discurso, Correa se refirió a la libertad de expresión y en ese sentido criticó los abusos de cierta prensa.

"En esto últimos tiempos se ha hablado mucho en el país de la libertad, por supuesto, ¿quién puede estar en contra de la libertad? Esa libertad que amamos tanto los seres humanos y sobre todo los ecuatorianos, porque la llevamos en la sangre", cuestionó el Mandatario.

"Acaso en nuestro país el Gobierno más represivo de la historia reciente no ha actuado también en nombre de la libertad. Acaso en nombre de la libertad no nos impusieron el neoliberalismo que esclavizó aún más a nuestra clase trabajadora, a los pueblos ancestrales, a los pobres", sostuvo.

También dijo que la palabra "libertad" ha sido convertida en "el comodín de la derecha, de los grupos de poder, de los mediocres, más aún cuando ya es cuestionable la transformación que vive la patria. Ojalá que el país aprenda de la historia", dijo. 

En ese sentido recordó los abusos de ese sector contra los empleados tercerizados y los migrantes. "Esa es la libertad que extraña nuestra burguesía. Entiéndase bien, no puede haber libertad sin justicia, y en países tan desiguales solo buscando la justicia se hallará la libertad", recalcó.

"Nuestra revolución ciudadana ofende a los poderes que siempre nos dominaron, que han dejado de gozar su malentendida libertad, porque ahora sí la justicia, y en consecuencia la libertad verdadera, no es solo para unos cuantos, sino para todos", añadió.

Ley de Comunicación

El Jefe de Estado calificó a cierta prensa como "descarados cómplices" de ciertos poderes políticos. Se refirió a la Ley de comunicación y criticó a algunas empresas mediáticas privadas.

"Ante tanta manipulación de la palabra libertad, sin embargo el debate fundamental es preguntarnos si una sociedad puede ser verdaderamente libre cuando la información viene de negocios privados con finalidad de lucro(...)", sostuvo.

"Si fuera por lo que leemos en los periódicos perderíamos todas las elecciones, en realidad ganamos todas las elecciones. La opinión pública ha sido secuestrada por algunos negocios dedicados a la comunicación", añadió.

También citó las palabras de su homólogo peruano Ollanta Humala: "la prensa tiene el poder para hacer daño, per ya no quita ni pone presidentes".

Además, mencionó el pacto de San José sobre los Derechos Humanos que se refiere al derecho a la honra. Sostuvo que este no excluye a los funcionarios públicos.

El Primer Mandatario reiteró que no se metan con su honor, su familia y los hechos del 30 de septiembre. "Ante cualquier infamia sobre estos tres aspectos responderé con la ley en la mano", advirtió.

"Ecuatorianos, latinoamericanos, tolerancia cero a las mentiras, para la libertad se necesita la verdad", sostuvo.

Asambleísta de oposición abandonan sala plenaria

Tras la primera intervención de Correa, los asambleístas de oposición Lourdes Tibán y Francisco Ulloa (MPD-Pachakutik) abandonaron la sala de sesiones de la Asamblea.

Ante la salida de los legisladores, se escuchó dentro del Pleno, gritos de "fuera, fuera”", silbidos y abucheos.

Ministros comparecieron

Los ministros coordinadores y el canciller Ricardo Patiño comparecieron hoy ante la Asamblea Nacional para explicar los logros y retos del Gobierno, en un acto que por primera vez contó con su presencia, pues en el pasado el Informe a la Nación era sólo pronunciado por el Presidente y el Vicepresidente.