Publicidad

Ecuador, 23 de Diciembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Señor Vivanco, no sea irresponsable y pruebe el fraude

16 de julio de 2012

Hay personalidades que se ganan ese adjetivo por generar, con sus acciones, pensamientos y palabras, recnocimiento y respeto. Y hay otras que van ganando ese estatus por la falta de respeto. En este segundo caso se ha ido colocando el señor Jorge Vivanco. De un tiempo a esta parte, trata mal a los medios públicos, señala defectos que los debería encontrar en su diario, oculta información para sus comentarios con el claro afán de hacer actoría política opositora.

Y ahora asume, para sus lectores y seguidores, que hay un fraude electoral instaurado. Si lo dijera, como acostumbra, como una mera opinión díscola y un poco nostálgica, pasaría, pero lo hace para reforzar lo que ya en la prensa comercial, en contubernio con la oposición, se construye para justificar acciones posteriores.

En plena sintonía con los otros Vivanco, propietarios de otro diario que se ensaña con todo lo que huele a público, Jorge es un irresponsable, ya no con el país ni con el Gobierno, sino con sus lectores. ¿Cómo prueba que el fraude está institucionalizado? ¿Qué le hace pensar que los ecuatorianos somos tan tontos e ilusos para que nuestra decisión sea manipulada? Y como periodista que se asume, ¿no es más válido y profesional mostrar las pruebas antes que hacerse eco de los mismos argumentos de la oposición? ¿Cómo apoya a ciertos candidatos, si ya está claro que hay un fraude institucionalizado? ¿Para qué participan Guillermo Lasso, Álvaro Noboa y la Izquierda Plurinacional, si el señor Vivanco, con su nutrida información y capacidad de análisis, ya sabe que hay un fraude? ¿Para qué informa su diario de todo lo que hacen los actores políticos, si no servirá para nada porque ya está todo amarrado? ¿Dónde queda su respeto al lector?

Esos personajes creados a partir de poderosas redes mediáticas son, además, como Vivanco, los referentes ideológicos y hasta morales de la oposición más irresponsable de este país.

Contenido externo patrocinado