Hace 100 años se inició una de las guerras más fuertes que ha enfrentado la humanidad. En medio de la turbulencia que implicaba la entrada de las tropas de Keiser a Bélgica, como parte del conflicto, nació Julio Cortázar, en su capital, Bruselas. La turbulencia dio como fruto a uno de los seres más pacíficos del planeta y un ícono de la literatura universal. 

Los rastros del escritor argentino están presente en una serie de libros que no solo son de su autoría. Están los seguidores de Cortázar que han trascendido su literatura para reescribir con sus influencias. Están los lectores que han permitido extender su voz hasta la actualidad.

A 100 años del nacimiento de Julio Cortázar, Argentina sigue celebrando, con un mes cargado de invitaciones para conocer o revisitar su literatura y su vida, con exposiciones -como la de su colección personal en el Bellas Artes-, jornadas y charlas acerca de su legado, espectáculos de jazz y narraciones.

A partir de hoy Diario EL TELÉGRAFO lanza un especial para celebrar al escritor de ‘Rayuela’.

Empezamos con una línea de tiempo sobre los detalles más importantes de su vida, pero iremos publicando durante la semana una serie de análisis sobre su trabajo y las conmemoraciones que se colan por su nacimiento en Ecuador.