Fútbol, ignorancia y educación
Retomando nuestro tema anterior y “Ronaldinho”, hacemos también anticipo a “Gattuso”. Hemos sido engañados en pensar que la educación se limita únicamente a lo que aprendemos en escuela tradicional y bajo los parámetros de las materias tradicionales (historia, ciencias, geografía, matemática) y que para lograr el éxito, debemos ir a una universidad. Deseo establecer que la educación no está limitada a un proceso escolar y que no se requiere una certificación para tener éxito en infinidad de campos laborales y empresariales.
Es aquí donde considero que un futbolista tiene ventajas. La ventaja del futbolista de alto rendimiento se puede basar sobre el hecho que este no podrá asistir al colegio tradicional porque su exigente agenda deportiva se lo impide, lo cual es el escenario perfecto para obtener grandes conocimientos en preparación para su futuro, haciendo óptimo uso de su tiempo entre entrenamientos y partidos. ¿Educándose de qué manera? Bueno, capacitándose en todas las cosas que no nos enseñan a través de la educación tradicional, por ejemplo, pero también estableciendo cuál es el significado de la palabra “Educación”, la cual proviene del latín y significa abrir el poder de la mente, apoyar o alimentar. O sea, la educación no tiene límites. No está limitada a un sistema escolar tradicional donde no se enseña a un chico y mucho menos a un futbolista cómo tomar dinero para generar más dinero (o sea cómo invertir inteligentemente). Qué es una deuda y cómo se deben administrar si llega a ser necesario adquirirla. Cómo hablar públicamente o comunicar y la más importante de todas, cómo administrar su tiempo para sacarle el máximo provecho y así poder buscar e identificar lo que verdaderamente le apasiona y enfocar allí su energía y sus recursos.
No existen futbolistas ignorantes, solo futbolistas mal educados y los que se educan mientras juegan y llegan al éxito, como es el caso del controversial Gennaro Gattuso, presentado aquí en nuestra próxima columna. (O)