Especial
Las juntas se instalaron a tiempo en Imbabura
Con total normalidad se desarrolló el proceso electoral en la provincia de Imbabura.
Santiago Vallejo, director de la Delegación Provincial Electoral, indicó que el 95% de las juntas se instaló antes de las 07:00, hora en la que empezó el proceso democrático.
Por ello, gran parte de los más de 360.000 empadronados pudo ejercer su derecho al voto antes del mediodía. En total, 1.004 juntas receptoras del voto (JRV) se instalaron.
Para la ibarreña Sofía Merino, el inicio puntual del proceso evitó la formación de largas filas de personas a la espera de sufragar, como -aseguró- ha ocurrido en ocasiones anteriores.
En el tradicional colegio Teodoro Gómez de la Torre, los votantes no debían esperar más de 10 minutos para sufragar.
Un ambiente similar se vivió en otros cantones, como Otavalo, Antonio Ante y Cotacachi. Todos los recintos contaron con puntos de voto asistido; además, la presencia de veedores fue permanente.
Pablo Jurado, prefecto de Imbabura, destacó el trabajo conjunto que desarrollaron las entidades de Gobierno y de control.
La Policía Nacional destinó 620 efectivos en la provincia para el control de la seguridad electoral, mientras que las Fuerzas Armadas destacaron a 825 uniformados.
Para Luis Fuentes, morador de la parroquia Peguche, del cantón Otavalo, el único problema del proceso fue no contar con papeletas que tengan contenido en kichwa, pues más del 60% de los habitantes en la provincia son indígenas. (I)