Publicidad

Ecuador, 19 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Cartas al Director

26 de agosto de 2012

Lo que jamás aceptaremos como ecuatorianos convencidos del cambio

Mientras hace unos días revisaba mi cuenta de Twitter, me encontré con una publicación del Dr. Abdalá Bucaram Ortiz, ex presidente de la República, que señalaba: “El sr aléxis mera no tiene hijos tiene 55 años, jamás tuvo novia. Respetable su preferencia. Pero como no es padre, q sabe de amar a los hijos?”. Al causarme estas líneas una enorme tirria, como ciudadano ecuatoriano respondí: “¡Usted habla incoherencias! ¿Hasta cuándo sigue con lo mismo?”.

Lógicamente no tardó en responderme y de una forma poco educada y propia solo de hombres necios, cobardes, mentirosos y absurdos, me escribió: “Incoherencias? No ves como reprime a mis nietos? de qué laguna saliste? Anda educate y moralizate”. Entonces le propuse la siguiente respuesta: “¡A mí no me mande a educarme y moralizarme, por favor! ¡Edúquese usted y deje de ser tan mediocre y mentiroso! ¡Hasta cuándo!”. No podía reaccionar de otra manera, ante un criterio de un vendepatria, de un hombre que detesta al Ecuador e incluso un criterio no fundamentado y vapuleado de faltas ortográficas. Enseguida me bloqueó en Twitter y nunca más me respondió. No toleró mi criterio. Ni tolera el de los demás. 

Considero de forma firme y tenaz que por dignidad nacional este hombre no debe regresar al país. Si regresa, perderemos la confianza nacional e internacional, el respeto a los derechos humanos y nuestra imagen que el Gobierno actual, junto con el pueblo, ha construido dejando en la sepultura anticuados paradigmas, dogmas y nefastas etapas de nuestra historia política.

El Ecuador fue un país desgraciado en lo que concierne a política. Iniciamos absurdamente con un presidente venezolano, que seguramente no guardó ningún amor por esta patria. Y continuamos hasta no hace mucho con politiqueros, nefastos hombres, corruptos y seres humanos faltos de visión. Hace más de cinco años elegimos a nuestros representantes de la forma más correcta y hoy ya se ven resultados positivos. Ha renacido en nuestro corazón la esperanza anhelada desde hace mucho tiempo.

El Dr. Bucaram es una completa vergüenza para nuestro país. Advierto la desgracia de la que nos haríamos cargo, si este hombre regresa al territorio nuestro. Y no imagino la desgracia que nos cargaríamos si llega al sillón presidencial. Fuera lo peor, lo más indignante y, como ecuatorianos, cometeríamos el error más grave de toda nuestra historia. No podemos conducirnos al éxito, a la dignidad, al respeto, al amor mutuo y al humanismo profundo con dirigentes como el Dr. Bucaram. Debemos conocer las mamarrachadas y las desgracias que trajo y ha traído al país. Es un politiquero que insta al odio, no sabe de respeto, educación, cultura y peor civismo.

Atentar contra el presidente de la República -como lo hace a diario-, contra el Dr. Alexis Mera, demás funcionarios de Gobierno y contra el pueblo ecuatoriano, es gravísimo. No aceptaremos desde estas trincheras que el Dr. Bucaram vuelva al Ecuador, pretenda nuevamente llegar a la presidencia, nos avergüence como país y, lo peor, nos arrebate la dignidad, la soberanía y el respeto que como ecuatorianos hemos edificado junto a nuestro Presidente y a todo ese prolijo Gobierno, que nos ha traído grandes cambios.

Señores, es hora de frenar tanto abuso y es hora también de hacernos respetar como niños, jóvenes, adultos, ancianos y, lo más emblemático, como grandes y hermanados ecuatorianos.

¡Hasta la victoria siempre!
José Luis Íñiguez Granda

Contenido externo patrocinado