Rusia enviará en el año 2019 una nave de investigación interplanetaria hasta Mercurio, el planeta que está más cerca del sol, informó ayer un portavoz de la industria aeronáutica y cósmica de ese país euroasiático.
“El objetivo de la misión Merkuri-P es el estudio de la superficie de ese planeta (mercuriana) y del impacto de la radiación solar sobre los procesos en marcha en ese planeta”, añadió la fuente a la agencia de noticias Interfax.

La nave, que será propulsada por un cohete portador Soyuz, tendrá que pasar no lejos del sol para llegar a Mercurio, que es investigado por un aparato similar estadounidense, el  Messenger.

La expedición del Merkuri-P será la continuación del trabajo de la nave Fobos-Grunt, que volará en noviembre próximo al vecino más cercano de la Tierra,   Marte, para instalar una estación automática en un satélite del planeta conocido como “rojo”, según anunció ayer Víctor Jartov, diseñador jefe de la Asociación de Producción Científica Lávochkin.

Según Estados Unidos, la sonda norteamericana Mariner-10 fue el primer aparato espacial en estudiar las características de Mercurio en 1974, mientras que en 2013 está previsto el lanzamiento del aparato europeo-japonés BepiColombo para el mismo propósito mercuriano.

Rusia, que asumió la pasada semana en solitario la responsabilidad de abastecer a la Estación Espacial Internacional tras la jubilación de los transbordadores estadounidenses, se ha marcado como prioridad enviar una nave tripulada por seres humanos a Marte. EFE