Estados Unidos y Rusia, los obstáculos para los "robots asesinos"
Los intentos para frenar el desarrollo de este tipo de armamento (robots asesinos) se han encontrado hasta ahora con la oposición de grandes potencias que están invirtiendo en la tecnología.
“El mayor obstáculo para negociar un tratado sobre ‘robots asesinos’ son Estados Unidos y Rusia”, señala abiertamente la coordinadora de esta campaña, Mary Wareham.
En declaraciones a la agencia EFE, Wareham defiende que “la gran mayoría de países” son favorables a legislar, pero son frenados por las “potencias militares”.
Aunque son los ejemplos más claros, EE.UU. y Rusia no son los únicos que están apostando por el desarrollo de “robots asesinos”. China, Corea del Sur, Israel o el Reino Unido trabajan también en este ámbito.
Los activistas, además, no descartan que otros países como Turquía e Irán estén desarrollando este tipo de tecnología.
Según fuentes diplomáticas, las potencias, en general, no se oponen de forma explícita a un tratado, pero han ido retrasando y buscando rebajar la ambición de las posibles medidas.
Activistas y expertos avisan del riesgo de que con estas armas las guerras se conviertan en algo aún más habitual o de que un error de una computadora puedan desencadenar un gran conflicto que sea imposible detener. (I)