Verdadera solidaridad con los adultos mayores de Nicaragua
En estos días recientes algunos en Nicaragua y fuera de ella se han rasgado las vestiduras por un supuesto maltrato a los adultos mayores, en su justa demanda por una pensión reducida.
En lo personal, y a como lo ha expuesto el gobierno del comandante Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, estoy de acuerdo con la demanda de los adultos mayores y creo que están en todo su derecho de protestar y reclamar.
Aquí el problema no es ya la protesta de los adultos mayores, sino la burda y evidente manipulación de algunos medios de comunicación comerciales nacionales de Nicaragua y algunas odiosas cajas de resonancia en el resto del continente.
Algunos datos reales: La pensión reducida consiste en otorgar al pensionado que no cumplió las cuotas requeridas por el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), de 750 semanas, un monto proporcional a lo realmente cotizado.
Este beneficio social fue eliminado en el año de 1994, por el gobierno de Violeta Barrios de Chamorro y los políticos de la derecha tradicional de Nicaragua sostenidamente han bloqueado su recuperación. Es desde entonces que existe este problema.
El gobierno del presidente Daniel Ortega ha buscado, desde el año 2007 cuando asume nuevamente el poder, -y aun desde que estaba en la oposición- soluciones a esta situación heredada de los gobiernos apegados al libreto neoliberal de destrucción sistemática de casi todo lo público para su posterior privatización.
Es así que en Nicaragua, desde el año 2007, ha pasado de tener 381 mil afiliados activos a 674 mil, es decir, casi el doble, lo que permite por tanto recaudar más y poder tener mayor capacidad financiera para dar respuesta a las demandas de todos los asegurados, incluyendo a los adultos mayores.
Ha aumentado el número de los pensionados, de 107.431 a 148.145. Todo lo anterior, a pesar de haber recibido al INSS prácticamente en la quiebra.
El presidente de Nicaragua sigue trabajando intensamente en dar una solución a esta situación y ha hecho saber a los adultos mayores, agrupados en la Unión Nacional del Adulto Mayor (UNAM), su permanente solidaridad y compromiso de solución a esta situación.
El día 24 de junio hubo en Managua una marcha de miles y miles de sandinistas y ciudadanos en solidaridad con la lucha de la UNAM.
El presidente de esta organización, Porfirio García, incluso se sumó a esta marcha promovida por la solidaridad del comandante Daniel Ortega. La odiosa y anticristiana manipulación de algunas empresas de comunicación y de la derecha tradicional en
Nicaragua y fuera de ella, que usaron la justa causa de los adultos mayores para causar daño, gracias a Dios no les dio ningún resultado.
Lo contrario, dieron espacio a demostrar nuevamente quién está verdaderamente comprometido y al lado de las causas justas.