Según fuentes del sector, el medicamento, denominado Anascorp o Alacramuyn, es el primero latinoamericano que obtiene la aprobación de la Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos (FDA, en inglés) con el fin de que sea comercializado en ese país.

La producción anual de este fármaco es de un millón de frascos, cifra que esperan elevar con una nueva planta de fabricación en el estado central de Toluca y que se prevé esté lista este mismo año, explicó el director del Instituto Bioclón, Juan López.

Agregó que se busca "incrementar seis veces más la elaboración del antídoto que servirá para la demanda del mercado mundial y atender la comercialización en Estados Unidos".

López ofreció una rueda de prensa conjunta con los principales responsables de desarrollar y comercializar este antídoto, aprobado ayer por la FDA.

"Se trata del primer medicamento de tercera generación cien por ciento mexicano, y también latinoamericano, aprobado por esa agencia para su venta en el mercado estadounidense a partir de hoy", afirmó  el investigador Alejandro Alagón, quien lleva 12 años trabajando en esta tecnología.

El fármaco se distribuye desde hace cinco años en México, así como en otros seis países de América Latina y tres en África. Según Alagón, se ha probado su eficacia reduciendo la mortalidad por picadura de alacrán en un 90 por ciento.

Según los cálculos del científico, solo en México hay anualmente unas 260.000 picaduras de alacrán, mientras que en Estados Unidos están en torno a 15.000 afectados.

Este antídoto, fabricado a partir de anticuerpos que se encuentran en la sangre de caballo, neutraliza los efectos del veneno del alacrán en menos de dos horas, a diferencia de medicamentos parecidos ya existentes en el mercado de Estados Unidos, cuyos efectos se prolongan entre 48 y 72 horas.