En el auditorio de la Casa de la Música había al menos 300 jóvenes. Muchos de ellos portaban banderas de las federaciones estudiantiles y otros lucían chompas con los colores de los estandartes de varios de sus respectivos países.

Antes de que inicie el programa,  los jóvenes revisaban ávidos el documento que contenía la lista de charlas y expositores; algunos también abrían sus computadoras portátiles para revisar correos electrónicos y tomar apuntes.

La inauguración del I Encuentro Internacional de Dirigentes Estudiantiles sobre Educación Superior y Conocimiento (ESC), en Quito, fue, al principio, conmovedor. “Pedimos a todos un minuto de silencio por los 43 compañeros de México”, fueron las primeras palabras del dirigente estudiantil ecuatoriano Carlos Iza.

Los jóvenes bajaron la cabeza y en el salón no se escuchó nada más que la respiración durante 60 segundos. La desaparición y supuesto asesinato de 43 estudiantes del estado de Guerrero ha conmovido a toda la opinión pública y se discutirá en la cita que convocó a 290 líderes estudiantiles del mundo para reflexionar sobre la educación superior en diversos contextos y realidades mundiales.

Para Aquiles Hervas, vocero nacional de la Confederación de Estudiantes Universitarios y Politécnicos deEcuador, hay coyunturas y problemas sociales que demandan que todos los jóvenes alcen la voz por un bien común. “Esperamos tener un diálogo con posturas similares. Hay situaciones de dolor en la actualidad que implican que los jóvenes tengamos posturas internacionales, por ejemplo con lo que se vive en México. Espero que al finalizar este encuentro haya un pronunciamiento general sobre estos hechos”, comenta  Aquiles y remata: “los problemas sociales no son específicamente de un Estado nacional sino son problemas globales, enfrentamos una dinámica de corte mundial que afecta a la educación”.

Hasta Quito también llegó el líder estudiantil de la Universidad Luis Vargas Torres, Marcos Suquitana. Estuvo presente en el desayuno de bienvenida a la delegación internacional que llegó a la capital el lunes.

Marcos mostró todo su interés en transmitir a los jóvenes de otras naciones los resultados de la intervención de la institución educativa a la que pertenece. “Durante muchos años la universidad ecuatoriana perdió el rumbo y se volvió mercantilista. En el caso de la Luis Vargas Torres, fue en parámetros más elevados. Ahora vemos una universidad que se enmarca en la ciencia, la calidad y una educación de calidez, donde el estudiante se siente seguro del título que va a obtener”, explicó Marcos, oriundo de Esmeraldas.

Algunos de los jóvenes se conocían de anteriores encuentros porque estrechaban las manos y se daban palmadas en la espalda al momento de encontrarse. Conforme avanzó la mañana, el intercambio de opiniones de quienes no se conocían lo suficiente fue mucho más distendido.

Aún les queda tiempo para compartir y debatir aspectos importantes sobre educación. Cuarenta delegados internacionales y 250 locales visitarán juntos las instalaciones de la Universidad de Investigación de Tecnología Experimental Yachay, en Urcuquí, también cenarán en el Panecillo y trabajarán en mesas redondas para elaborar propuestas  comunes, trazar objetivos y la posibilidad de ampliar nuevos encuentros a futuro.

El argentino Nicanor Martínez, representante de la Organización Encuentro NacionalPopular Latinoamericano y vocero de la delegación internacional, destacó la importancia de redefinir los objetivos de la universidad y de la educación superior. “Es una tarea fuerte, debemos entender los procesos históricos anteriores, comprender cómo fueron constituidos (...)”, sustentó.

René Ramírez, titular de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación, durante su ponencia, dijo que se debe trabajar para que la universidad tenga autonomía, que no esté supeditada al mercado sino a generar pensamiento propio.

Además, se refirió a la necesidad de revisar los costos excesivos en las universidades particulares. “Vamos a regular aranceles (...) Máximo hasta diciembre, yo espero tener una normativa que permita esta regulación”, aseveró Ramírez.