Ministerio de Educación ordenó reincorporación
Estudiantes del Montúfar se solidarizan con agente herida
El Ministerio de Educación informó ayer que los estudiantes de tercer año de bachillerato del colegio Montúfar que habrían participado en los actos violentos del 15 y 16 de febrero pasado, y que fueron sancionados con reubicación, volverán al establecimiento educativo para concluir la enseñanza secundaria.
Esta disposición de Augusto Espinosa, ministro de Educación, fue difundida en un comunicado que indica que habrá una nueva reubicación para el resto de estudiantes que también fue sancionado.
“En los casos de los estudiantes que cursan en niveles distintos a tercer año de bachillerato se procederá con una nueva reubicación si esto posibilita un mejor acompañamiento por parte de sus representantes al proceso educativo”, agrega el comunicado.
En la misiva se indica que aunque fueron sancionados por faltas graves: “No existió evidencia suficiente para determinar que cometieron actos de violencia de hecho o de palabra contra cualquier miembro de la comunidad educativa, autoridades, ciudadanos y colectivos sociales” o que “deterioraron o destruyeron en forma voluntaria las instalaciones institucionales y los bienes públicos y privados”.
Este anuncio se realizó antes de que 4 alumnos del colegio Montúfar se reunieran con Jéssica Soliz, policía que resultó afectada durante las protestas estudiantiles. La agente aún se encuentra en tratamiento médico.
Ellos llegaron al domicilio, ubicado en el sur de Quito, con Diego Mejía, comandante general de la Policía Nacional.
Gonzalo Criollo, presidente de la Asociación de Estudiantes del colegio Montúfar, reiteró que no pedirá disculpas a las autoridades (ministro de Educación y exrector de la institución) por los disturbios registrados. Y aseguró que se trató “de un acto de solidaridad con la policía herida”.
El estudiante añadió que “se debería investigar profundamente para determinar a los responsables de estos disturbios”. (I)