La World Wide Fund for Nature (WWF) propone cada año apagar las luces del planeta durante una hora. Este evento se realiza el último sábado del mes de marzo.

En el año 2007 se apagaron las fuentes de energía caseras e institucionales por primera vez. En Sidney participaron cerca de dos millones de australianos.

A través de esta acción simbólica, que se replica en el mundo, a la que se unen cada año municipios, instituciones públicas y empresas privadas, se busca que la sociedad haga conciencia sobre la importancia de ahorrar energía; ya que este consumo también genera contaminación, relacionada con el cambio climático y la emisión de Co2 (dióxido de carbono).

Los ecuatorianos también pueden unirse a esta acción apagando, voluntariamente, las luces y sus aparatos eléctricos.

En las instalaciones de la Prefectura del Guayas, que también apoya esta iniciativa, se  desarrollará un evento artístico y los asistentes recibirán velas para recordar “La hora del planeta”, como una forma de ahorrar energía en sus hogares y trabajos.