El crecimiento general de la asistencia en todos los niveles de educación básica y bachillerato es el logro fundamental que destacó el ministro de Educación, Augusto Espinosa, en la rendición de cuentas que brindó ayer en Quito.

“Solo en el último año hubo 500 mil nuevos alumnos. En la Sierra hay un 26% de migración de estudiantes de la educación privada a la pública y en la Costa del 31%”, dijo Espinosa, quien a la vez reconoció que el nivel de matrícula en el bachillerato aún no es el anhelado, sobre todo porque en varios planteles la oferta termina con el décimo de Educación General Básica (EGB).

Al momento la tasa de asistencia al bachillerato es de 66% y se espera que hasta 2017 llegue al 80%. “Queremos implementar desde este año unidades educativas completas para que la deserción estudiantil en este nivel cada vez sea menor”, acotó.

En la actualidad existen alrededor de 224 mil estudiantes en 10° de EGB y de ellos 43 mil no pueden continuar con el 1° de bachillerato en la misma institución por la falta de esta oferta.

En Educación Inicial se registra el mayor crecimiento con un 64% con más de 300 mil alumnos.

Otro de los anuncios de Espinosa es que se analiza contar con un examen estandarizado en séptimo de EGB, similar el examen estandarizado Ser Bachiller que se aplica a los alumnos del último año de colegio. “Tendremos un sistema de evaluación que cada año nos irá mostrando cómo estamos avanzando. Ya no nos tomará de sorpresa la evaluación de la Unesco o Pisa”.

Espinosa hizo también un tercer anuncio: debido a la crítica situación financiera, por la caída de los precios del petróleo, se ha decidido suspender este año el programa de las jubilaciones voluntarias a los docentes. “Informaremos oportunamente sobre este tema y conversaré con las autoridades financieras del país para ver cuando las podemos reabrir”.

El sistema de jubilaciones obligatorias se mantendrá con normalidad. Solo en 2013 se jubilaron cerca de 11 mil maestros, la mayoría de forma voluntaria.