Limpieza tardó en Centro Histórico
Varias zonas del norte y sur de la capital amanecieron ayer limpias, pues el personal municipal de aseo de las calles recogió la ceniza y los restos de basura que deja la tradicional quema de viejos, tras las celebraciones de año nuevo.
Así, la Tribuna del Sur, al sur de la capital, fue testigo del concurso de años viejos, que se realiza anualmente lució pulcra, pues desde que terminó el evento, aproximadamente a las 02:00, según moradores del sector, llegó un grupo de más de 100 trabajadores de la Empresa Pública Metropolitana de Aseo (Emaseo).
El trabajo concluyó aproximadamente a las 06:00 de ayer, manifestaron moradores del sector. Lucía Guerra, propietaria de una tienda de abarrotes, quien además felicitó la rapidez con la que el personal de la compañía municipal acudió a limpiar la calle.
Otros puntos del sur de la ciudad, como la Av. Teniente Hugo Ortiz, además de barrios como Solanda, Turumbamba y Quitumbe, también lucían limpios.
Sin embargo, otra realidad se observaba en el sector de las avenidas Mariscal Sucre y Necochea, donde la ceniza de los años viejos quemados y los restos de basura se encontraban en cada cuadra.
Luis Urquizo, también tendero, señaló que todos los años tardan en limpiar su barrio, que suele concluir en horas de la tarde.
El mismo panorama se observó en el Centro Histórico, específicamente en la calle Guayaquil, a la altura de la Plaza del Teatro, en la que había mucha ceniza y por el viento afectó el medio ambiente.
Sin embargo, antes del mediodía de ayer hubo trabajadores de la Emaseo recogiendo los restos y basura en ese sector de la ciudad. Ellos se dirigieron hacia la avenida Occidental, en el barrio San Roque, en la que incluso había un monigote que -hasta esa hora- todavía estaba en llamas.
En las calles del norte de la ciudad había lugares a los que Emaseo llegó temprano en la mañana, mientras que en otros no, por ejemplo, las avenidas Amazonas, Eloy Alfaro, República y 6 de Diciembre se encontraban impecables; pero en la zona de la Mariana de Jesús y América, aún estuvo sucia.
Andrés Reyes, morador del sector La Granja, comentó que en ocasiones, por tratarse de una urbanización cerrada, han sido los propios residentes que han limpiado las calles y aceras. “Esperamos que este año los trabajadores del Municipio puedan entrar, porque en realidad es complicado limpiar la ceniza”, afirmó y agregó que esa es la razón por la que la mayoría de sus vecinos quema el año viejo sobre la avenida Mariana de Jesús.
Otro sector en el que hasta el mediodía de ayer no llegaba el servicio de limpieza de las calles fue La Floresta, especialmente sobre el parterre de la avenida La Coruña desde la Plaza Artigas hasta la Ladrón de Guevara.
Serena Vargas, propietaria de una frutería de la zona, comentó que el problema radica en la quema de los monigotes en el parterre, porque resulta difícil barrer la ceniza y llega a la entrada de su negocio, lo que ahuyenta a los clientes.