En algunos casos, la no intervención es intencional por parte de los dueños
El Centro Histórico, el más afectado por las lluvias
La fuerza de la temporada de lluvias que ha vivido la capital en los últimos meses ha dejado en evidencia el nivel de deterioro en que se encuentran algunas edificaciones del Centro Histórico. El pasado fin de semana, 4 casas colapsaron y 2 de ellas tienen interés patrimonial.
Según Christian Rivera, vocero del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal, la caída de esas viviendas no solo se debe a la intensidad de las lluvias, sino, sobre todo, a la falta de mantenimiento.
Rivera explicó que desde noviembre se investiga a 19 viviendas patrimoniales que tienen un deterioro severo por el descuido de sus dueños. Estos inmuebles se encuentran en un estado calificado como “bastante vulnerable”.
Por ejemplo, el 2 de febrero, el Municipio aseguró una casa ubicada en la calle Rocafuerte y Ambrosio Vásconez, en el barrio Loma Grande, que está al borde del colapso. Su propietaria es una mujer de la tercera edad que se niega a salir.
Por otro lado, el 11 de marzo, organismos de socorro evacuaron a la última persona que habitaba una casa patrimonial declarada en emergencia por alto riesgo de colapso en las calles García Moreno y Esmeraldas.
Los casos de falta de intervención se presentan a pesar de que el Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP) tiene 4 programas de ayuda a propietarios de edificaciones patrimoniales: rehabilitación de vivienda; recuperación de imagen urbana (RIU); quinta fachada y mantenimiento menor.
En cada uno, el IMP hace un aporte económico en la intervención, pero no se responsabiliza del 100% del costo de los trabajos requeridos.
En el programa rehabilitación de vivienda, por ejemplo, la inversión municipal límite es de $ 10 mil por cada casa. En el RIU, el subsidio del Cabildo alcanza el 50% del valor del presupuesto aprobado para inmueble. En quinta fachada, destinado a la recuperación de cubiertas, se da el 50% de subsidio en el valor del presupuesto, con un límite de $ 15 mil por casa. Mientras que en mantenimiento menor el crédito llega hasta los $ 10 mil.
Esto porque al tratarse de bienes privados, la responsabilidad del mantenimiento de las viviendas recae principalmente en el dueño.
Según el concejal Mario Guayasamín (Alianza PAIS), integrante de la Comisión de Áreas Históricas, tanto en el Centro Histórico como en otras zonas patrimoniales como La Floresta, conviven 2 realidades en torno a las condiciones de estas viviendas.
Una es que los propietarios voluntariamente dejan que la casa patrimonial se deteriore y la otra es que los dueños son adultos mayores o personas que no cuentan con los suficientes recursos para realizar una rehabilitación integral del inmueble.
En el primer caso, dice el Concejal, suelen ser herederos que buscan usufructuar del bien y por eso dejan que la casa se estropee para que salga del inventario de bienes patrimoniales y pueda ser derrocada.
Las ordenanzas establecen que se puede autorizar el derrocamiento total de estas viviendas cuando hay un estado avanzado de deterioro. Además, para realizar algún trabajo en una casa patrimonial se requieren permisos; incluso cuando el deterioro es intermedio, se debe presentar un proyecto de restauración.
De ahí que algunos propietarios no se acogen a los programas del IMP ni realizan una restauración, argumentando que resulta costoso.
En ocasiones, el Municipio compra el inmueble con el fin de restaurarlo y usarlo con otros fines. Sin embargo, dice Guayasamín, el Cabildo no tiene los recursos para comprar cada casa patrimonial.
A su criterio, se debe realizar un nuevo inventario para determinar el número de casas que requieren cuidado especial, así como definir el estado de cada una de las viviendas, su localización, historicidad y su valor patrimonial.
Esto permitirá, de acuerdo con el edil de AP, definir un mapa de acción futura. (I)
DATOS
En el Centro Histórico están registrados 5 mil inmuebles patrimoniales; de estos, 4 mil corresponden a viviendas y comercios privados.
El Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP) identificó 19 propiedades de este tipo en un estado calificado como “bastante vulnerable”. El IMP tiene 4 programas de restauración.
Para este año, el Instituto Metropolitano de Patrimonio anuncia que continuará con la recuperación de edificaciones patrimoniales. Para esta labor tiene un presupuesto asignado de $ 3 millones.
En toda la capital se contabilizan cerca de 10 mil bienes inmuebles patrimoniales, que incluyen la arquitectura monumental religiosa y administrativa, edificaciones modernas, viviendas, plazas, entre otros. (I)