El pasado martes el Concejo Metropolitano decidió aumentar el plazo para que toda persona que realice una actividad comercial en Quito pueda obtener los permisos de funcionamiento, entre ellos, la patente y la Licencia  Única para el Ejercicio de Actividades Económicas (LUAE).

La nueva fecha que se fijó como tope para la legalización de los negocios es el próximo 30 de agosto. Sin embargo, algunos dueños de comercios no están seguros de poder cumplirla en ese plazo.

Mónica de Valverde, propietaria de un depósito de gas ubicado en la ciudadela Atahualpa (sur) desde hace 30 años, explicó que desde 2012 está esperando pasar la inspección del Cuerpo de Bomberos y así poder renovar la LUAE.

“El argumento del Municipio es que debemos conseguir  que el uso de suelo sea compatible con la actividad comercial, y de acuerdo con las últimas ordenanzas aprobadas se establece que los depósitos de gas no pueden estar ubicados en sitios en los que haya aglomeración de gente, y resulta que hay dos discotecas y un hostal que no tienen ni 10 años de funcionamiento en el sector”, dijo.  

Valverde indicó que hasta el momento ha gastado  6.000 dólares en el trámite. Tuvo que adecuar la antigua bodega e instalar un sistema de seguridad, que le llevó a colocar sensores antiincendios y a entablar el depósito (de 15 metros). Pese a ello, no ha logrado pasar la inspección oficial.

A la par de la ampliación del plazo, a este tipo de negocios les notificaron que se reunirán representantes del Cabildo, del Cuerpo de Bomberos y la Secretaría de Ordenamiento Territorial, Hábitat y Vivienda, para determinar qué es lo que sucedería con estos casos.

La LUAE fue creada bajo la Ordenanza Municipal 308, en marzo de 2010 y, a partir de esa fecha, los establecimientos comerciales que se ubiquen en el Distrito Metropolitano de Quito deben tramitar el permiso. Por ello, el uso del documento está en plena vigencia.

A ello se adjuntan los permisos correspondientes que deben poseer los locales comerciales: patente, permiso del Cuerpo de Bomberos, de la Dirección de Salud, del Ministerio de Turismo y del Ministerio del Interior.

Por su parte la patente está vigente desde 2004, cuando se aprobó la Ordenanza Metropolitana 135, con la que se reguló el pago de la misma. Esta fue ratificada en 2011 y 2012 con la ordenanza. Además, esto  se confirma en los artículos 546 al 551 del Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (Cootad), que  es la base legal para el cobro.

Mónica Yugcha, dueña de una tercena ubicada en la ciudadela IESS FUT, dijo que sacar la patente  este año le ha significado pérdidas en su negocio, pues debió estar cinco días en las ventanillas del Cabildo para poder obtener la clave y así pagar el rubro.

Desde hace nueve años, Yugcha renovaba el documento con tan solo pagar en el banco, debido a que el negocio estaba a nombre de otra persona. “Este año me ha tocado estar toda la semana en la administración zonal y para ello debí cerrar el local”, indicó.

Por esas razones, ella y otros dueños de negocios consultados creen que el plazo es insuficiente para cumplir con este y otros requisitos.

La semana pasada el alcalde Augusto Barrera indicó que a la par de la extensión del plazo se está trabajando en la mejora de los sistemas informáticos. “La idea es que el usuario reciba en su correo electrónico una clave y pueda hacer todos los pagos vía electrónica, para  evitar las largas colas para  el pago por estos dos conceptos”, señaló.   

Edwin Palma,  director tributario del Municipio, aclaró que la extensión de plazos regirá para el ejercicio fiscal 2013. Sin embargo, dijo que el desafío de la administración es facilitar la “tramitología municipal”, para lo cual realizan cambios en el sistema y procesos actuales, por otros que permitan fortalecer el concepto del “Municipio en Casa”, evitando las filas.