Tanto dueños de transporte como choferes de unidades que laboran en la terminal terrestre de Riobamba, se encuentran preocupados por el llamado al paro por parte de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), dicen que esto afectaría a sus labores y representaría pérdidas considerables para su economía y la de sus familias.

De forma diaria, más de 12 mil personas se movilizan desde la terminal terrestre, 300 unidades de transporte salen con 42 pasajeros cada una, las unidades se dirigen a distintos puntos del país, con más frecuencia los buses arriban a las ciudades de Quito y Guayaquil, por lo que los turnos para estos destinos son cada 15 minutos.

Para Marcelo Cárdenas, propietario de la unidad Chunchi, el paro “no tiene razones lógicas”. Para él un día sin trabajar implicaría una perdida diaria de $200, por lo que no comparte la ideología de los miembros de la Conaie.

“Nosotros tenemos préstamos en bancos, porque cambiamos de unidades para un mejor servicio, dejar de percibir nuestros ingresos sería terrible, ni siquiera entiendo qué reclaman, yo no estoy de acuerdo en cierre de vías, para eso hay el diálogo que utilicen esa herramienta”, indicó Cárdenas.

Esta opinión es compartida por Romel Terán, uno de los choferes de la unidad 22 de Julio que realiza sus viajes hasta la ciudad de Ambato y regresa a Riobamba, por cada turno él percibe la cantidad de $30.

“Es mi salario, no puedo dejar de realizar viajes, si pretenden paralizar esta actividad nos perjudicaría, no estamos de acuerdo en dejar de trabajar y laboraremos el 13 de agosto”, manifestó Terán.

Para algunos de los pasajeros que de forma diaria circulan en estas unidades, el llamado al paro nacional “solo traería daños en lugar de soluciones”, ya que todos necesitan transportarse de un lugar a otro.

“Yo trabajó en Riobamba pero vivo en Ambato, así que todos los días utilizo el transporte, si cerraran vías o alterarán algo, me perjudican, porque me dedico a las ventas, mi familia y yo dejaríamos de recibir dinero y eso no estoy de acuerdo”, señaló Tamara Basantes pasajera.

La decisión de laborar de forma normal el 13 de agosto también fue expuesta por el gremio de taxistas de Chimborazo que agrupa a 3500 socios, quienes señalaron que respaldan al Gobierno Nacional y no permitirán el cierre de vías.

“No entiendo porque protestan, este es el único gobierno que de verdad se ha preocupado por la gente, nosotros invertimos en nuestros taxis y trabajaremos de forma normal”, añadió Medardo Ángel Silva, vicepresidente de los taxistas en Chimborazo. (I)