Israel ya tiene un balance de potenciales bajas en caso de guerra con Irán
La posibilidad de una inminente guerra entre Israel e Irán volvió a cobrar fuerza ayer luego de que el líder supremo de la revolución iraní, ayatolá Ali Jamenei, afirmara que el Estado de Israel “será borrado de la geografía mundial” y su territorio “devuelto a la nación palestina”.
En tanto, el presidente israelí, Simon Peres, rompió ayer su silencio sobre un hipotético ataque a Teherán al mostrarse convencido de que su país no puede atacar Irán sin el apoyo de Estados Unidos.
Las declaraciones de Peres se dieron un día después de que el ministro israelí de Defensa Civil, Matan Vilnai, afirmó que su país está preparado para una posible guerra con Irán, que podría durar unos 30 días en varios frentes con ataques de misiles contra ciudades israelíes y habría unos 500 muertos.
Ante esto, las palabras del ayatolá Ali Jameini son una respuesta a las filtraciones sobre un posible e inminente ataque militar israelí contra las centrales nucleares iraníes.
En la víspera de la celebración del “Día de Jerusalén” (Al Quds), Jameini dijo en un encuentro con cientos de veteranos de la guerra que enfrentó a Irak e Irán entre 1980 y 1988: “La luz de la esperanza brillará sobre la cuestión palestina y esta tierra islámica ciertamente volverá a la nación palestina. El artificial régimen sionista desaparecerá del paisaje geográfico”.
Este deseo sobre el futuro de su principal enemigo no es nuevo y tanto Jameini como el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, lo han repetido en varias ocasiones.
El creador de la República Islámica de Irán, ayatolá Ruhola Jomeini, instituyó en 1979 el “Día de Jerusalén”, el último viernes del mes de ayuno musulmán del ramadán (hoy), con el fin de mostrar la solidaridad con el pueblo palestino y su oposición al control de Jerusalén por parte de Israel.
El jefe del Estado israelí, Simon Peres, por su parte, dijo ayer que confía en que la Casa Blanca es sincera cuando repite que no permitirá que Irán desarrolle armamento nuclear y rechazó la posibilidad de de atacar el territorio iraní sin acuerdo con Estados Unidos.
“Está claro que no podemos hacerlo solos”, subrayó Peres a un canal local y añadió que Israel puede como máximo “hacer tropezar” los planes de la República Islámica, a la cual las potencias occidentales acusan de desarrollar programas nucleares con objetivos militares, lo que Teherán niega.
“Con todo el peligro que conlleva, no estamos solos (...) No lo dicen sólo para contentarnos”, agregó en un momento en que medios locales aseguran que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, y su titular de Defensa, Ehud Barak, están impulsando un ataque contra Irán en solitario y antes de las elecciones presidenciales de próximo noviembre en Estados Unidos.
En las últimas semanas, Netanyahu ha recordado y enfatizado las palabras de los dirigentes iraníes como justificación para el uso de la fuerza militar contra su proyecto nuclear. “Israel no puede permitir que un régimen fanático que pide públicamente la destrucción de Israel y promueve el terrorismo internacional tenga armas nucleares”, advirtió Netanyahu, dando en un claro mensaje a su gran aliado, Estados Unidos.