Israel y Palestina a la espera de canje de un soldado por presos
Israel espera impaciente el retorno, en los próximos días, de su soldado Gilad Shalit, en manos de Hamás desde 2006, tras haber llegado con el movimiento islamita que gobierna Gaza a un acuerdo histórico que prevé a cambio de su liberación la de unos mil prisioneros palestinos.
Los israelíes se alegran de volver a ver al tanquista de 25 años, después de cinco años de cautiverio en Gaza, a imagen de esos muchachos de su misma edad que cantaron y bailaron durante la noche en torno a la tienda de la familia Shalit, frente a la residencia del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en Jerusalén.
Asimismo, la alegría por el anuncio del pacto entre Hamás e Israel dio paso en Gaza al nerviosismo de las familias por saber si sus hijos estarán entre los afortunados que vuelven a casa. Cientos de miles de personas salieron a las calles la noche del martes en Gaza para congratularse por la próxima salida de 1.027 reclusos de las prisiones israelíes.
Muchos de ellos, que gritaban y hacían sonar el claxon de sus coches, tienen familiares, amigos o seres queridos en esas cárceles. El canje debe desarrollarse en dos fases: 450 detenidos serán liberados en una semana y otros 550 dentro de dos meses, indicó el jefe de Hamás en el exilio, Jaled Mechaal. EFE/AFP