Ecuador prioriza proyectos estratégicos
La inversión,tanto del sector público comode los gobiernos autónomos descentralizados (GAD) en Ecuador, se sextuplicó entre 2006 y 2012, al pasar de 1.943 millones de dólares a 11.118 millones. Esto significa un 15,3% en relación al Producto Interno Bruto (PIB).
Es decir, “de cada 100 dólares que tenemos como ingresos, 15 se invierten para el futuro, lo que permitirá al país disponer de mayores ingresos en el largo plazo” afirmó Andrés Aráuz, Subsecretario de Inversión Pública de la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo (Senplades).
Solo en 2012, la inversión del Gobierno Central ascendió a 6.287 millones de dólares, cifra también récord en la historia nacional. Los recursos asignados a las empresas públicas y a los gobiernos autónomos descentralizados se emplearon en la ejecución de importantes obras de desarrollo social.
El subsecretario explicó que el monto de inversión tiene como fuente al sistema de administración financiera, que es el instrumento por el cual todas las entidades públicas ejecutan los recursos que se les asignan. “Esto corresponde a lo que se llama Estado Central, que es una clasificación presupuestaria e institucional que comprende a la función ejecutiva, legislativa, judicial, de control y participación y a la función electoral”.
Un estudio de la Senplades revela que si el país mantenía el mismo nivel de inversión
pública aplicado antes de 2007, la tasa de crecimiento del PIB habría sido apenas del 2,6%, en lugar del 8% alcanzado en 2011.
Sectores beneficiados en 2012
Con la inversión pública, el Gobierno ha impulsado un sinnúmero de proyectos importantes, como la construcción de centrales hidroeléctricas, de la refiniería del Pacífico, obras viales, e infraestructuras en los servicios de salud y educación, entre otras. En 2012, la mayor inversión pública fue para el sector de desarrollo social y talento humano, con el 37%; producción y sectores estratégicos el 35%, seguridad y justicia alcanzó el 24%; y patrimonio y política económica el 4%.
Aráuz indicó que la inversión pública es la acumulación de capitales y capacidades de la producción ecuatoriana, que permite enfrentar la situación actual del mundo y los problemas socioeconómicos que tiene el país. Además, la inversión ha dado lugar a la dinamización y sostenimiento de la economía en el corto plazo, la construcción de obras, la generación de mayores plazas de trabajo y que la población mantenga un ritmo de consumo estable. También benefició a las empresas privadas nacionales y estimuló la inversión extranjera directa.
Situación en América Latina
Según la Senplades, Ecuador es el país con mayor índice de inversión pública en la región respecto al PIB. Los últimos informes de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) indican que en 2011 la nación ecuatoriana registró el más alto índice con el 14%, frente al 13,3% de Bolivia, 8,6% de Panamá, 4,9% de México, 3,6% de Nicaragua, 2,9% de El Salvador, 2,7% de Uruguay y 2,3% de Costa Rica.
Al respecto, el funcionario apuntó que el análisis para comparar la inversión pública con el resto del continente, se hace en base al tamaño de la economía de los países. En el caso de Ecuador, señaló, que es el país que más invirtió frente a su tamaño económico. Es decir, la inversión pública como porcentaje del PIB.
Obras priorizadas en 2013
Por su parte, el secretario de la Senplades, Fander Falconí, detalló que la inversión pública en 2013 se concentrará en seis proyectos prioritarios. El primero es la Refinería del Pacífico, una obra que debía estar lista en 2013, según el cronograma inicial, pero que tomará más tiempo para su construcción. Este complejo petroquímico demandará alrededor de 10.000 millones de dólares en inversión, pero aún no se han conseguido los recursos. Para el efecto, continúan las conversaciones con empresas chinas, coreanas y rusas.
El segundo proyecto emblemático es el financiamiento del 50% para la construcción del metro de Quito, que alcanza una inversión de 750 millones. También se continuará con el desembolso anual para los avances de la construcción de la Central Hidroeléctrica Coca-Codo Sinclair, que requiere una inversión total de 2.205 millones de dólares para generar 1.500 megavatios de energía y que también registra un retraso. Inicialmente, debía entrar en operación comercial en 2014, pero el nuevo plazo es 2016.
Además, el Régimen espera destinar unos 3.986 millones para la construcción de puentes, vías, carreteras y caminos vecinales y 271 millones para la edificación de la Universidad Regional Amazónica Ikiam, en la ciudad del Tena, provincia de Napo. Finalmente, se continuará con la Misión Manuela Espejo, para lo cual se asignarán alrededor de 96 millones de dólares.
Inversión pública para el futuro
La Senplades destacó que en el presente año el Gobierno continuará con el apoyo al desarrollo del sector social como eje priorizado. De hecho, se prevé un incremento de la inversión del 16,6%. Para Aráuz, este porcentaje se calculó tomando como referencia la estructura del gasto efectuado en 2012. Sin embargo, no adelantó criterios respecto al verdadero monto de inversión pública de 2013, por encontrarse el país en un proceso electoral.
La Constitución de la República dispone que en período electoral, el presupuesto del año anterior rige hasta que se posesione el nuevo Presidente el 4 de mayo, fecha en que se elabora la nueva proforma para su envío a la Asamblea Nacional.
Participación de otras entidades
Según la Senplades, antes de invertir en algún sector de la economía, es necesario realizar estudios previos, cuyo proceso está a cargo del Instituto Nacional de Preinversión (INP), entidad adscrita a la Secretaría de Planificación Oportunamente, el subsecretario dio a conocer que en un período de 10 a 20 años, el INP planifica los proyectos que generen bienestar a los ecuatorianos.
En ese marco, se destacan los estudios efectuados para la construcción del Metro de Quito, el control de inundaciones Bulubulu-Cañar, el trasvase Daule– Vinces y el tranvía de Cuenca. Constan, además, los proyectos del tratamiento de aguas residuales en Quito, de energías renovables en García Moreno, Baeza y Ocaña, y la creación de centrales hidroeléctricas medianas. También se promueve la investigación para la construcción de la Ciudad del Conocimiento.