Una vez al año, los limones invaden la ciudad de Mentón, en Francia. Aunque sea invierno, en esta urbe muy cerca de Mónaco (alrededor de 12 km para ser más precisos), sus habitantes no dejan de festejar la Fiesta del Limón y las Naranjas, una colorida celebración que se realiza desde 1934.

Hoy es considerado un acontecimiento único, que comienza el 14 de febrero y se extiende hasta el 4 de marzo. Cada año atrae alrededor 230 mil visitantes. En esta festividad participan, además, más de 300 profesionales y se emplean 145 toneladas de cítricos.

Durante los 19 días que dura la fiesta, la ciudad de Mentón utiliza los limones y las naranjas para crear diversas figuras, como estatuas, torres y animales. Los Jardines de Biovès acogen las esculturas elaboradas por los artistas que cada año inviertenhoras en colocar cada cítrico para dar forma a su bien planeada escultura. Las calles de la pequeña ciudad, llenas de confeti y efectos de luz, son ocupadas por bailarines, músicos y diferentes personajes disfrazados.

Los turistas que visitan esta ciudad durante este mes también disfrutan de las diversas actividades que se desarrollan en estos días, como el tradicional desfile de carrozas de frutas de oro, todo acompañado de orquestas musicales y grupos folclóricos.

Cada año la fiesta cuenta con una temática diferente y es una festividad en la que participan casi toda la población de Mentón, una ciudad francesa situada en el departamento de Alpes Marítimos, en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, casi en la frontera italiana, a medio camino entre la ciudad italiana de Ventimiglia y el principado de Mónaco. El gentilicio de sus habitantes en la lengua mentonasca es: mentonasc o mentounasc.

Del año 1346 al 1848, la ciudad de Mentón perteneció al Principado de Mónaco, con la única interrupción de la Revolución francesa. Tras un breve período en el que perteneció a Cerdeña, en 1860 pasó a formar parte de Francia, como consecuencia de un referéndum. Durante la Segunda Guerra Mundial fue ocupada por Italia.

El limón es uno sus símbolos, ya que se trata de la única región de Francia en la que fructifican los limoneros, gracias a un incomparable microclima. El geógrafo Elisée Reclus le dio el sobrenombre de “La perla de Francia”. En Mentón residieron y fallecieron el novelista español Vicente Blasco Ibáñez y Aubrey Beardsley. Diferentes temáticas han sido abordadas cada año, desde temas tradicionales como el amor, la música, las flores, hasta el Carnaval de Brasil o de la India, pasando por personajes de dibujos animados. Esta fiesta coincide con el Carnaval de Niza y el Gran Premio de Fórmula 1en Mónaco, por lo tanto, la región tiene un mes lleno de fiestas.

Al parecer, su origen se remonta al siglo XIX, cuando los ciudadanos de la localidad crearon su propia fiesta de Carnaval para atraer la llegada de visitantes en la época de invierno, ya que históricamente solo los recibían en verano.

Esta fiesta no estuvo asociada a los limones hasta que Mentón se convirtió en el primer productor de Europa de este cítrico. Esta festividad se planifica con varios meses de anticipación y para muchas familias es un honor participar en la elaboración de estas esculturas que se han convertido en íconos de esta celebración.

Uno de los eventos más esperados es el Paseo del Sol. Cada domingo durante las celebraciones, una gigantesca comparsa recorre la ciudad acompañada de danzarines, músicos y diferentes personajes. Para los pobladores de Mentón, el limón, además, de tener un aroma único, es una fruta que todos deberían apreciar, pues tiene muchas propiedades. Hay quienes conocen al limón por sus efectos medicinales, tanto en la medicina tradicional como en la naturista.

Así, la infusión de las hojas se recomienda en ciertos trastornos nerviosos como antiespasmódico; el aceite esencial de la corteza del fruto es estimulante y se aplica contra la tenia; el zumo se ha empleado para contrarrestar el veneno. Aunque en esta fechas, Mentón recibe el mayor número de turistas, esta urbe también es conocida por sus playas. Existecasi una docena de balnearios privadas que ofrecen servicio de bar y sillas para tumbarse. Su patrimonio histórico es excepcional.

Mentón le ofrece al visitante cientos de tesoros que podrá descubrir desde el corazón del casco histórico hasta las zonas más altas con vistas panorámicas, pasando por los espléndidos palacetes particulares construidos a principios del siglo XX en la periferia de la ciudad. Mentón está orgullosa de ser la ciudad del gran poeta y artista polifacético Jean Cocteau, y posee uno de los más grandes museos del mundo consagrado al artista: el Museo Jean Cocteau, Collection Séverin Wundermar, que se encuentra en un edificio concebido por el arquitecto Rudy Ricciotti. Esta es una razón más para viajar a esta ciudad francesa que tiene uno de los mejores climas