La “recuperación personal” luego de cinco años de un proceso judicial a los que calificó de “muy difíciles”, es lo único que desea el mayor en servicio pasivo, Fidel Araujo, tras recibir ayer el indulto presidencial, consistente en el perdón del cumplimiento de la pena.

Araujo fue detenido por la Policía Nacional la tarde de ayer en un centro comercial del Valle de Los Chillos, y fue trasladado a la Unidad de Flagrancias, luego al Centro de Detención Provisional (CDP) de El Inca, en el norte de Quito. Ahí permaneció varias horas hasta firmar los documentos para recuperar su libertad en la noche.  

Araujo había sido condenado a tres años de prisión, por el delito de incitación a la rebelión de la fuerza pública por los hechos del 30 de septiembre de 2010 (30-S).  

Ese día, Araujo apareció en los exteriores del hospital de la Policía, hablando por teléfono durante los disturbios policiales en el Regimiento Quito, según vídeos  mostrados por la Fiscalía.  

Él agradeció la actitud del Gobierno Nacional por el indulto, pero de igual modo ratificó que no tuvo implicación alguna en el delito por el que se lo procesó.

“El ciudadano tiene que enmarcarse en las normas, las leyes y la Constitución de la República”, dijo.

El indulto fue otorgado luego de que el Ministerio de Justicia emitió un informe favorable sobre el caso de Fidel Araujo.

Ledy Zúñiga, titular de la cartera de Estado, explicó que la medida fue otorgada conforme a las competencias del Presidente de la República en el artículo 74 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).   

La Ministra señaló que los requisitos establecidos en dicho artículo son detención, sentencia ejecutoriada y una buena conducta, “todo eso sirvió de sustento para el informe favorable”.

Zúñiga  ejecutó la boleta de libertad para Araujo conforme al indulto. Y puntualizó que este no es el único caso de perdón presidencial en los procesos judiciales del 30-S.  

“Sorprendido” se mostró Reinaldo Zambrano, abogado del militar en servicio pasivo, al recibir la noticia del indulto a su defendido. “En buena hora, eso demuestra que la tesis de su inocencia y por la que hemos luchado en este tiempo es  verdadera”, puntualizó.  

El jurista manifestó que se encuentra pendiente una acción extraordinaria de protección en la Corte Constitucional, que habían solicitado previamente para evitar la ejecución de la sentencia.

Sin embargo, tras el indulto  Zambrano expresó que la libertad de Fidel Araujo no tiene precio, y eso es lo que hay que valorar porque no estará detenido.

El presidente Rafael Correa concedió el indulto mediante Decreto 879.