Zamora-Machala-Cuenca-Riobamba.-

Autoridades de Zamora Chinchipe pedirán la declaratoria de emergencia en el territorio debido a los daños causados por el invierno en viviendas y carreteras, así como por el colapso de los servicios básicos.

Según el gobernador, Víctor Guamán, solo esperan los informes que deben presentar cada uno de los cantones para hacer llegar la solicitud a la secretaria de Riesgos, María del Pilar Cornejo. “La situación es complicada en la provincia y necesitamos ayuda”, indicó la autoridad.  

Al menos, sostuvo, ya quedó habilitado una paso provisional en la vía Loja-Zamora, luego de la limpieza que realizó maquinaria del Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP).

Las 50 familias evacuadas por las inundaciones y deslaves siguen albergadas en el coliseo de la ciudad y reciben ayuda del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES). En Azuay, si bien han disminuido las lluvias, persisten los desprendimientos de tierra en la vía Molleturo-Puerto Inca, Gualaceo-Limón, entre otras.      

Tito Torres, gerente de Celec-Hidropaute, aclaró que los aludes no han afectado ninguna de las centrales que están en la cuenca del Paute. “Acá hubo la crecida de la quebrada Sopladora, pero no causó daños”, dijo.

El hecho trágico en esta región fue la muerte de Ismael Ortiz, de 36 años, jefe del Cuerpo de Bomberos de Paute. El uniformado cayó accidentalmente a las correntosas aguas del río Paute, cuando junto a otros rescatistas buscaba el cuerpo de una mujer que desapareció en días pasados.

Destrucción en dos zonas

Alrededor de 10 familias del sector de Alao, perteneciente a la parroquia Pungalá, en Riobamba, perdieron enseres y animales de campo debido al temporal.

Hasta ayer aún recogían los objetos que fueron arrastrados por el lodo desprendido de una montaña que rodea a la comunidad.

Los pobladores todavía no se recuperan del susto que pasaron al escuchar el ruido estruendoso que provocó el descenso de tierra y rocas hasta sus viviendas.   

“Yo solo grité para que salieran de la casa porque la tierra bajó muy rápido. Apenas pudimos escapar. Fue un susto terrible. Teníamos cuyes, conejos y gallinas que quedaron enterrados por el material” señaló María Caz Masa Llamuca, habitante de San Antonio.

En tanto, las fuertes lluvias que soportó la semana pasada la parroquia Sinsao, en Zaruma, dejaron grandes estragos.

Una grieta en la corteza terrestre se ha presentado con el pasar de los días, debilitando las bases de varias viviendas y amenazando con derrumbar el coliseo.

El acceso a Sinsao aún no es normal debido a que literalmente se ha partido la carretera. El último fin de semana, 8 viviendas debilitadas por las lluvias terminaron por desplomarse completamente.

El MTOP, la Secretaría de Riesgos y el Municipio de Zaruma trabajan para habilitar la vía de acceso que conduce a Salvias, Ortega y otros sitios de las provincias de El Oro y Loja. (I)