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Ecuador, 22 de Diciembre de 2024
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El Telégrafo

Querella contra Colombia en La Haya pasa a la fase oral

Colombia presentó ayer en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) los últimos documentos de la fase escrita del contencioso que mantiene con Ecuador por las fumigaciones aéreas con herbicida tóxico sobre los cultivos de coca en territorio ecuatoriano, indicaron a la agencia EFE fuentes diplomáticas.

Con la presentación de esos documentos, conocidos como “dúplica”, la CIJ cierra la fase escrita del caso, en el que los jueces todavía tienen que fijar una fecha para que se celebren las audiencias orales.

Ecuador ya presentó el pasado 31 de enero la segunda parte de sus argumentos escritos (“réplica”), donde expuso los últimos detalles de las directrices de sus argumentos.

El contenido de los documentos presentados en la fase escrita de los contenciosos se mantienen confidenciales hasta que se abra la fase oral del caso.

Ecuador denunció en marzo de 2008 a Colombia argumentando que “las aspersiones ya han causado daños serios a la población, el grano, animales y al medio ambiente natural de la parte ecuatoriana de la frontera, y supone grave riesgo de causar daño en un futuro”.

Quito basó su denuncia contra Bogotá en el artículo XXXI del Pacto de Bogotá de 1948, en el que ambos países reconocieron las competencias de la Corte Internacional de Justicia.

Además, Ecuador también invoca el artículo 32 de la Convención de las Naciones Unidas de 1988 contra el tráfico ilegal de drogas.

Ecuador pide que se le indemnice por el daño causado, refiriéndose a la muerte o problemas de salud de personas, los daños o pérdidas de propiedades, los perjuicios a los recursos naturales o los costes de seguimiento de esos problemas derivados de las fumigaciones.

Por su parte, Colombia rechazó en su día la demanda presentada por Ecuador porque mantiene que las fumigaciones aéreas sobre las plantaciones de coca se hacen respetando los protocolos internacionales, según los cuales se tienen en cuenta aspectos como el viento, la altura y la soberanía ecuatoriana.

Bogotá recuerda que son los rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que promueven los cultivos ilícitos.

Además, defiende que ya aceptó que no se utilizara la aspersión aérea en una franja de 10 kilómetros a lo largo de la frontera y, en su lugar, adelantar programas de erradicación manual.

Sobre la indemnización de los ciudadanos ecuatorianos que sufrieron daños, Colombia mantiene que está dispuesta a ofrecer compensaciones, pero que no ha recibido solicitud alguna por parte de Quito.

Esta demanda fue interpuesta en el año 2008, cuando los dos países rompieron las relaciones diplomáticas. Pese a que los vínculos fueron normalizados en 2010 la querella prosiguió.

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