La auditoría permitió mejorar contrato 2008
Con respecto a la publicación de ayer, bajo el título “En 15 años, las telefónicas pagaron $ 106 millones y ganaron $ 7 mil millones”, hacemos la siguiente aclaración porque se deslizó una interpretación equivocada, que la consultora Gurovich & Asociados explica: “No tuvimos ocasión de estudiar las distorsiones que hubiesen podido haber en contratos anteriores que el Estado suscribió con operadoras de telecomunicaciones, y por ende menos pudimos recomendar la revisión de los contratos de concesión.
Nuestra consultora realizó una modelación del negocio de telecomunicaciones móviles en el Ecuador, con miras a definir el precio a cobrar por las concesiones que se debían renovar el 2008 - 2009, lo que finalmente culminó con la suscripción de los contratos respectivos con las operadoras.
Esta modelación se realizó con apego absoluto a las normas vigentes en el Ecuador y utilizando las mejores prácticas de ingeniería y economía, buscando un justo equilibrio en la protección de los intereses del Estado y el bienestar del público”.
La telefonía móvil ingresó al Ecuador en noviembre de 1993, cuando las empresas Otecel y Conecel ganaron la concesión a través de un concurso público internacional. Entre los socios de Otecel estaban diario El Comercio, El Universo, Ecuavisa, Banco Popular, Metro Guayaquil. Y como accionistas de Conecel participaron Telecel, Simón Parra (dueño del banco Amazonas), Fidel Egas (Banco Pichincha) y otros.