Creada en 1961, AI se financia de donaciones
En la página web de Amnistía Internacional (http://amnesty.org) se destaca que, para su trabajo, la organización defensora de los derechos humanos creada en 1961, cuya sede está en Londres (Reino Unido) y que tiene oficinas en 80 países: “Envía expertos a hablar con víctimas; asiste a juicios en calidad de observadora; se entrevista con autoridades locales; mantiene contactos con activistas de derechos humanos; hace un seguimiento de los medios de comunicación locales y globales; publica informes detallados e informa a los medios; y hace públicos sus motivos de preocupación en folletos, carteles, anuncios, boletines y sitios web”.
Destaca que “ayudamos a poner fin a los abusos contra los derechos humanos movilizando a la opinión pública para que presione a los gobiernos, grupos políticos armados, empresas y organismos intergubernamentales, mediante: protestas callejeras, vigilias, campañas de envío de cartas, educación en derechos humanos, conciertos de sensibilización, captación de apoyo directo, asociaciones con grupos de activistas locales, actividades comunitarias y colaboración con grupos estudiantiles”.
AI dice ser un movimiento global de 3 millones de simpatizantes, miembros y activistas en más de 150 países que hacen campaña para poner fin a graves abusos de derechos humanos. Dice disponer de varias salvaguardias para proteger su autonomía: independencia de todo gobierno, ideología política, interés económico y credo religioso”.
En cuanto a su financiamiento, AI dice que la mayoría de sus ingresos procede de “donaciones de particulares de todo el mundo”.