El Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público (Inmobiliar) anunció que se firmó el contrato de expropiación de la gasolinera, que está junto al edificio la ‘licuadora’, en la avenida Quito, entre las calles Padre Solano y Alejo Lascano.  

El acuerdo se estampó por  los trabajos de demolición que se efectúan en el antes  Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap).

John Hill, coordinador Zonal Litoral Oeste del Servicio de Gestión Inmobiliaria del Sector Público, adelantó que en los próximos días se tramitará el traspaso de esa propiedad a nombre del Estado. “Finalmente aceptaron”, expresó el funcionario con respecto a las negociaciones con los propietarios de la estación de servicio.

En los próximos días se tramitará el traspaso de la propiedad. Aún no se define día del cierreComo dice la ley -agregó Hill- se pagó el valor del catastro que es, aproximadamente, de 1,5 millones. Pero el plazo para desocupar todavía no está establecido. “Cuando firmemos la escritura se establecerá una fecha para desarmarla”, indicó el funcionario en la reunión informativa que mantuvieron Inmobiliar, el consorcio Tecnovía-Padko y los vecinos.

En ese encuentro, Ramón Maestre, representante de Tecnovía-Padko (compañía que desmonta el edificio), precisó que hasta diciembre de este año derribarán el auditorio y en enero de 2014 comenzarán con la torre. La contratista tiene 8 meses para culminar los trabajos.

En la cita, algunos de los concurrentes plantearon sus inquietudes y propuestas a las autoridades y al consorcio. En el primer caso, la vecina Elsy Muñoz denunció que hace una semana los moradores de la zona estuvieron asustados, porque de la ‘licuadora’ salió abundante humo. Ella cuestionó que no se haya informado a los vecinos sobre lo que ocurría, ya que muchos abandonaron las viviendas. “Todos creían que se incendiaban sus casas, pero después de que llegaron los bomberos nos dimos cuenta que era por los trabajos”.

Ante esto, Maestre justificó que ese fue un hecho aislado, que se originó porque cayó soldadura en ciertas lonas, pero que “no se va a repetir”.

Otros vecinos se quejaron por el polvo. Sobre esta situación, Robert Cazco, representante de Inmobiliar, indicó que vigilarán el cumplimiento de cuidado ambiental. “Hay un proceso de fiscalización permanente que   controlará la eficacia y oportuna acción de la contratista”.