En Huaquillas, provincia de El Oro, se declaró la emergencia debido a las inundaciones en las zonas pobladas.
Las lluvias en Guayaquil aún no llegan al promedio máximo histórico de marzo (Galería)
El total de las precipitaciones registradas en marzo alcanzó el 87% del promedio histórico mensual, según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi).
Según un informe difundido ayer, hasta el 29 de marzo se registraron 275 mm por metro cuadrado de lluvia cuando el promedio normal es de 315,8 mm.
En las zonas cercanas a canales y sectores elevados que no cuentan con pavimentación es donde los efectos de la temporada invernal se sienten con mayor fuerza.
En la manzana 1045 de Nueva Prosperina, por ejemplo, al menos 3 viviendas han quedado con las bases debilitadas. Uno de los inmuebles, incluso, está por caerse.
Daniel Castillo, habitante del sitio, refirió que el canal que atraviesa el lugar se hace más profundo y ancho cada año. “Hace 5 años Interagua ofreció taparlo, pero quedó en promesa”, enfatizó.
Ayer en la tarde, fuertes lluvias cayeron por cerca de una hora en algunas zonas del puerto principal. La vía a Daule y la Perimetral, entre otras avenidas, se inundaron causando congestión vehicular.
Las intensas lluvias presentadas desde el 19 de marzo han provocado deslizamientos, inundaciones, afectación a infraestructura vial, daños a edificaciones públicas y privadas en varias provincias. Santo Domingo, Bolívar, El Oro, Loja y Los Ríos son las regiones con mayor impacto.
Hasta ayer se contabilizaron 17 fallecidos producto de inundaciones y deslizamientos, según un reporte de la Secretaría de Gestión de Riesgos (SGR).
El deslizamiento en la vía Alóag – Santo Domingo ocasionó 6 víctimas mortales en la provincia de Pichincha. También se produjeron 2 decesos en Santo Domingo, 3 en Bolívar y 6 en Loja.
Por el momento se han declarado en emergencia 6 cantones: Urdaneta, Montalvo y Babahoyo, de la provincia de Los Ríos; Chillanes (Bolívar), Balsas (El Oro) y Loja (Loja).
La Secretaría evaluó las afectaciones para determinar las necesidades que se requerían en las localidades. Estas fueron atendidas con la capacidad tanto local como nacional a través del Sistema Nacional Descentralizado de Gestión de Riesgos (SNDGR).
Del mismo modo se coordinó la promoción de la salud, saneamiento e higiene con el Ministerio de Salud Pública (MSP); infraestructura y rehabilitación, con el Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP); activación de albergues, familias acogientes y asistencia humanitaria con el Ministerio de Inclusión Económica y Social, y los planes de contingencia institucionales con los GAD cantonales y provinciales.
La Unidad de Monitoreo de Eventos Adversos de la SGR informó que 245 familias han sido albergadas (963 personas), 771 personas han sido llevadas hacia familias acogientes y están activos 22 albergues. Se coordinó la entrega de 567 complementos alimentarios, 345 kits de aseo personal, 88 kits de vestir, 150 kits de dormir y 999 refrigerios.
Para atender las emergencias, 2.718 personas se han movilizado. Se están utilizando 128 equipos de seguridad, con 251 unidades de emergencia; 283 vehículos y 475 vehículos pesados se han desplegado.
En Esmeraldas, un deslave de tierra de 40 metros de extensión sobre un camino vecinal tiene incomunicadas a las comunidades Boca del Mache, Cucaracha y Los Ángeles con el cantón Quinindé.
La emergencia se presentó el sábado por las torrenciales lluvias, según manifestó Ricardo Landázuri, dirigente de Boca del Mache, quien arribó ayer al GAD Municipal para pedir el envío de maquinaria y reabrir la vía.
El Gobierno Provincial de Esmeraldas declaró en emergencia vial a los 7 cantones de la provincia.
Seis cantones orenses están en emergencia
Santa Rosa, Huaquillas, Balsas, Portovelo, Piñas y Zaruma se encuentran en estado de emergencia debido al desbordamiento de ríos, deslaves, viviendas derrumbadas e inundaciones en áreas de cultivos.
El fin de semana las lluvias cayeron con fuerza en Portovelo y en el cantón fronterizo Huaquillas, donde el río Amarillo y el Zarumilla se salieron de su cauce arrasando con todo a su paso.
Paulina López, alcaldesa de Portovelo indicó que 3 casas resultaron con daños por la fuerza del caudal. Otras 100, afirmó, están en peligro de caer ya que el río ha carcomido sus bases. Lo mismo ocurre con las plantas de beneficio asentadas al pie del afluente.
El Ministerio del Ambiente intervino con maquinaria para evitar que los desechos mineros vayan a parar al río. El cantón, de 13 mil habitantes, continúa sin el servicio de agua potable, debido a que un deslave rompió la tubería madre que abastecía a Portovelo.
Situación similar viven las familias de Huaquillas, que afrontaron el domingo el desborde del río Zarumilla, que afectó a las familias asentadas al filo del canal internacional. “Estamos en emergencia permanente. Son más de 100 familias las que se inundaron y perdieron algunos de sus enseres”, dijo el alcalde Ronald Farfán.
El comercio fronterizo también está interrumpido. “Los locales de ropa se llenaron de agua y los delincuentes se aprovecharon del percance para llevarse la mercadería”, sostuvo Hermel Rentería, comerciante.