¿En qué ha consistido el trabajo de la Secretaría de Gestión de Riesgos en la presente temporada invernal?

Nosotros siempre tenemos un plan de contingencia invernal que se arma desde las mesas técnicas nacionales hacia cada una de las provinciales con una agenda de reducción de riesgos, que es liderada por cada uno de los gobernadores.
El año pasado hubo un anuncio del fenómeno del Niño por lo que la preparación fue más intensa que para un invierno considerado normal. Esto permitió que en los temas de reparación muchos prefectos trabajen sobre todo en la limpieza de canales, reforzamiento de vigas de puentes y en obras que pudieran proteger a sus ciudadanos de las consecuencias de las lluvias fuertes, accediendo también al crédito que damos a través del programa 50/50 (50% subsidio y 50% crédito).

¿Las lluvias se han mantenido dentro del promedio?

Las precipitaciones han sido intensas. Hemos tenido lluvias de más de 150 mm en 3 días, lo que en algunas ocasiones representa entre el 30% y el 60% de las lluvias que se registra en un mes. Todas estas acciones sirvieron primero para que el impacto de las lluvias, si comparamos con situaciones similares anteriores, sea mucho menor.
También está la preparación de la respuesta, porque siempre vamos a tener impacto cuando tenemos ciudadanos viviendo en zonas de riesgo. Esa respuesta debe ser efectivo, pues en el momento de un proceso de inundación, el sistema se activa.

¿Existen acercamientos con los municipios para que conozcan cuáles son las familias en zonas de riesgo?

En el país tenemos aproximadamente 200 mil familias en situación de riesgo y los cabildos correspondientes ya están enterados. Hemos entregado mapas de las zonas seguras para que los gobiernos locales puedan elaborar los respectivos planes de reubicación.

En lo que corresponde a Guayaquil ¿ya se conoce cuáles son los sectores más vulnerables?

Nosotros hemos entregado al Municipio de Guayaquil un mapa de las zonas más propensas a inundación y hemos advertido que tienen ciudadanos en riesgo en Nueva Prosperina, Monte Sinaí, las riberas del estero Salado... El tema aquí es ya una acción municipal, las inundaciones no solo son por la marea como dice la autoridad local (Jaime Nebot). Es un tema de que falta completar el drenaje urbano para evitar inundaciones.

Entre las zonas más afectadas también están las invasiones...

Es un problema recurrente en el país porque las personas buscan asentarse en zonas de riesgo. En estos lugares tiene que haber cero tolerancia a las invasiones que surgieron después de 2010 y las que están desde antes de ese año  tienen que ser solucionadas por las autoridades locales. Esto significa provisión de servicios básicos, lo cual incluye la proyección del drenaje adecuado.
Las personas tienen que conocer que siempre hay opciones de acceder a soluciones habitacionales de forma ordenada. He conocido la situación de Monte Sinaí donde se han caído casas construidas sobre el estero. En este punto, los municipios deben encontrar la solución que mejor se ajuste a su presupuesto y el de los beneficiarios.

La Gobernación del Guayas presentó recientemente una denuncia en la zona del trasvase Daule–Chongón y responsabilizó al Cabildo, pero este ha dicho que ese lugar no es de su competencia sino de Senagua. ¿Es correcta esta apreciación?

El tema de mantenimiento del canal por supuesto que es de Senagua, pero la disposición de basura y la ocupación en los 150 m adyacentes es un asunto del Alcalde Jaime Nebot. Yo estuve ahí el lunes de la semana pasada y constaté que estaban botando basura. Después de eso, de la noche a la mañana, mágicamente desaparecieron los desechos.
Tengo fotos, había chamberos... y gracias a la intervención del Gobernador, con equipos de diferentes instituciones, incluyendo a esta Secretaría, se advirtió de este problema y se está solucionando. (I)