“La enseñanza, el deporte y la biología lo han sido todo para mí”
Ella es de esas maestras cuya voz se escucha desde la primera banca hasta la que está al final, casi pegada a la pared. Pronuncia cada palabra hasta la última letra, con una dicción perfecta, pese a sus 82 años, 50 de los cuales los ha entregado a la docencia, en varias asignaturas, en diferentes colegios.
Su nombre es Gloria García de Castro y su historia no puede ser contada sin mencionar al deporte, la ciencia y su amor por la enseñanza.
“Cuando estuve en 5to. curso de Bachillerato me gradué de profesora de Educación Física. Jugaba básquet, un deporte al que le di muchos años de mi vida como entrenadora y maestra”, recuerda. Por esto, su primer trabajo fue como profesora de Educación Física en el Colegio 28 de Mayo.
“En 1967 hicimos la revista de gimnasia masiva luminosa, para la inauguración del Estadio Modelo, con 3 mil alumnas con linternas, todas vestidas de negro”.
Dice con orgullo que la organización de este evento representó varias propuestas de trabajo en otras instituciones y un premio de la Unión Nacional de Periodistas, para ella y para el colegio.
Como instructora de esa asignatura, dirigió al equipo de básquet de la institución, por su experiencia en ese deporte.
“Fuimos campeonas 5 veces, no había quién nos gane. Incluso organizamos un campeonato con la participación de delegadas de Panamá, Colombia y Perú”, rememora entre sonrisas.
Pero como dice esta también doctora en ginecología y obstetricia, “la juventud se va y ya no hay la misma energía para brincar y moverse”, por eso, aprovechando sus conocimientos de medicina, ingresó a la Facultad de Filosofía de la Universidad de Guayaquil para especializarse en Química y Biología.
“De alguna forma, nunca me deslindé de mis ciencias biológicas, porque eso verdaderamente me apasiona”.
Y le entusiasma tanto, que dejó de lado su carrera de medicina, para dedicarse únicamente a enseñar. “Tuve mi consultorio en dos zonas de la ciudad, y me iba muy bien, pero mi amor por la docencia pudo más”, sostiene.
Según cuenta, ha sido maestra en los colegios La Inmaculada, Francisco de Asís y el 21 de Julio, del cantón Yaguachi. Educación para la salud, Nutrición e Investigación han sido varias de las materias que ha impartido.
Desde 1973 trabaja para la Universidad de Guayaquil y es profesora de la especialización de Química y Biología, en las materias de Didáctica y Formación Profesional y Puericultura, para Párvulos. Pero hace un mes llegó a sus manos un documento que cambió su panorama.
“El Gobierno nos dice a los maestros que tienen más de 70 años, que deben retirarse. Cuando leí ese papel, sentí la muerte”.
Dice que su primera reacción fue mirar las paredes del colegio en el que ha trabajado de forma ininterrumpida por tantos años, recorrerlo y llorar.
Al hablar de su método de enseñanza, Gloria dice que ella no utiliza libros y que se ha enfocado en impartir la parte teórica de sus materias, pero sin descuidar la formación en valores de sus alumnas.
“La juventud que ha pasado por mis manos ha sido bien formada. Nunca he tenido que lidiar con chicas rebeldes ni malcriadas. Siempre he sido fuerte con mis alumnas, exigente en el estudio, pero con un alto sentido de afecto”.
Es por esto que hoy tiene gratos recuerdos y miles de anécdotas de todas sus ex alumnas; esas mujeres que ahora son profesionales e, incluso, sus colegas.