George Packer no es bolivariano, comunista ni mucho menos defensor de la Ley de Comunicación. Lo mismo se puede decir de Arcadi Espada, uno de los periodistas españoles más reconocidos. Y los dos, en las últimas semanas, han defendido la verdad como un valor fundamental del periodismo, la democracia y la sociedad. El primero es uno de los estadounidenses más críticos de su país y en su libro El desmoronamiento describe por qué EE.UU. ya perdió la hegemonía política. Y es él, Packer, quien dice: “La desaparición de los hechos en el periodismo y en la política es un desastre porque ya no tenemos un marco común con el que todos estemos de acuerdo antes de empezar nuestras feas discusiones”. Y parecería que escribiera sobre lo ocurrido en los últimos días en Ecuador. Los hechos, los datos, las cifras y los documentos son los que cuentan para la prensa y para asumir cualquier postura por parte de los ciudadanos. Espada ha dicho que debe ser el Estado el que garantice la verdad en vista de la publicación de noticias falsas y la postura de políticos que mienten. Si lo dijera acá, no solo sería tachado de correísta sino también censurado en la prensa comercial. Con estos antecedentes, los dos expertos en comunicación deberían ser leídos por los consultores políticos y directores de medios para que no tengamos el ‘fraude’ político desatado por plegar a Guillermo Lasso, quien no acepta que perdió las elecciones presidenciales. (O)
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