Los derechos humanos no son prioridad ni son de dominio de todos los candidatos a la Presidencia de la República de Ecuador. Esto se evidenció durante el debate organizado por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
En varios tramos del encuentro fuimos testigos de la exacerbación del machismo: ‘¿Quién se atreve a robarme a mí?’, o ‘pan y látigo’ , expresiones que muestran lo "macho" que es el candidato, como si no supiéramos a qué conduce el “dale correa”, o el “mátenme si les da la gana”.
Los comentarios que convocaron a la xenofobia son demagógicos porque no solucionan los graves problemas de seguridad de un país. Pero también son peligrosos porque pueden promover la violencia y eso no es admisible en ningún lado. ¿Se olvidan que tenemos migrantes en Estados Unidos o en Europa o cómo nos indignamos cuando hay actos de racismo en contra ecuatorianos en el Metro de Madrid?
Quizá lo más abominable de ese debate fueron las palabras del candidato Geovanny Andrade, de Unión Ecuatoriana: "Debemos ver por qué las niñas salen de casa y tienen relaciones sexuales a tan corta edad". Candidato las niñas no tienen relaciones sexuales, son violadas y se necesita justicia para sentenciar a los culpables y políticas públicas efectivas de prevención y atención a las víctimas.
La presencia de una sola candidata mujer para la presidencia plantea reflexiones sobre el espacio de las féminas en la democracia, así como sus derechos sexuales y reproductivos. Los presidenciables comentaron sobre la despenalización del aborto por violación, un tema duro del que no quieren hablar en voz alta. Ximena Peña, de Alianza PAIS (AP), está a favor de no condenar a las mujeres con alguna discapacidad o niñas que fueron violadas. El candidato de la Izquierda Democrática (ID), Xavier Hervas, comparte el mismo criterio que la asambleísta de AP.
Los postulantes, además, toparon el tema de la violencia contra la mujer, que dejó 112 víctimas del femicidio durante 2020. César Montúfar, de la coalición Partido Socialista-Concertación, dijo que hará un plan de prevención y erradicación de la violencia contra la mujer y otras formas de violencia. Hervas fue específico y dio una cifra para luchar contra esa otra pandemia en este país: $8`000.000 para casas refugio y ayuda a las víctimas.
Nos queda una pregunta: ¿Por qué no se atreven a hablar sobre los derechos y de la participación de las diversidades sexuales? Solo Montúfar ha sido directo sobre el tema, pero sí explicaron que habrá pena de muerte o cadena perpetua para los corruptos, esas penas no existen en Ecuador, son inconstitucionales.
Los ciudadanos necesitan debatir las propuestas de los candidatos y promover el diálogo. Ojalá podamos elegir un Presidente con capacidad para entender y atender los derechos humanos.