Si algún reconocimiento hay que hacerle a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) es el denodado esfuerzo que hace por mentir todo el tiempo, con base en los informes (¿bien pagados?) de Fundamedios y Aedep. De acuerdo con su última resolución, Ecuador está en silencio, nadie se expresa, los medios están cerrados, los periodistas presos o sometidos a la tortura de la palabra oficial y/o la ciudadanía anda con mordaza por las calles, pero sobre todo en las redes sociales. Así como a ellos les gusta hablar de percepciones, su informe las crea de un modo perverso. Nadie puede explicar por qué ese informe le dedica 10 páginas a Ecuador y solo 3 a México y 3 a Colombia, cuando sabemos que, lamentablemente, en esos dos países queridos ocurren graves problemas con la prensa y los periodistas en particular. ¿Será acaso que quienes proporcionan esa información reciben más dinero por cada caso inventado, exagerado o sacado de contexto? ¿O el ‘ministerio de comunicación de la oposición’ regional tiene tapado uno de sus ojos?
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