La economía requiere de sabiduría y no de proselitismo político
17 de septiembre de 2015Gobernar un país, sobre todo en un momento de dificultades económicas en el mundo, no es un asunto para improvisar, inventar de la nada o hacer proselitismo político. Ecuador vivió una de sus peores crisis económicas y quienes gobernaron en ese entonces (dos décadas) no resolvieron ninguna de las causas reales y estructurales. Al contrario, hicieron lo que recetaban en otros países, y ya sabemos las consecuencias. No solo perdimos el sucre, como moneda soberana, sino que emigraron centenas de miles de compatriotas. Y ahora, que la situación mundial obliga a tomar medidas, aparecen quienes no hicieron nada en el pasado a proponer la fórmula mágica del ‘ajuste necesario’. No es fácil perder ingresos por alrededor de 7 mil millones de dólares. Ninguna economía lo soporta. Lo prudente y sabio son las soluciones más solventes y no criticar al ‘modelo’. Con otros modelos y con los precios del petróleo altos la pobreza no bajaba y alcanzar la equidad social no era una prioridad política. Así que dejémonos de proselitismo y trabajemos con sabiduría colectiva y solidaria. (O)