Mientras la expectativa dominaba el reinicio del fútbol en Ecuador, la incertidumbre e impotencia invadieron a medio millón de abonados de tres cableras ecuatorianas.

La Corporación Nacional de Telecomunicaciones, CNT, prendió la primera alarma 24 horas antes que se reinicie la LigaPro. Mediante un comunicado anunció que terminaba el acuerdo con Goltv y por tanto no transmitiría los partidos del torneo.

Martha Moncayo, gerenta de CNT, sintetizó la posición de la telefónica. “CNT es una empresa estatal y mi obligación es manejar bien los dineros de los ecuatorianos. Después de 6 meses de consultas, análisis técnicos y esfuerzos para buscar un equilibrio económico de un contrato incumplido por Goltv nos vimos obligados a tomar una decisión muy complicada. Además, como empresa estatal CNT no puede perder en un negocio y tal como van las cosas perderíamos millones de dólares si continuaba el convenio”.

Horas más tarde, Cable Tv y Claro anunciaban que tampoco transmitirían los partidos con iguales razonamientos que CNT.

El retiro de las tres cableras es grave, las tres suman más del 52 por ciento de los suscriptores de la televisión pagada en Ecuador (CNT tiene el 26%; Tv Cable 14 y Claro 2). Como dato informativo Directv tiene el 38 %, Univisa 2% y el resto las cableras pequeñas. Es decir suman más de medio millón de afectados.

Aparte del retiro de las cableras, Goltv deberá responder en los tribunales una demanda de 23 millones de dólares que reclama CNT por daños y perjuicios cuando Goltv no respetó una cláusula de exclusividad. La demanda fue presentada el 11 de agosto.

Sin embargo, Goltv parece ignorar la golpeada y dramática situación económica del país. Exige cumplir los contratos sin aceptar renegociaciones que reclaman las tres cableras.

La arrogancia de Goltv llegó alto. Dijo no a la propuesta de CNT para transmitir el fútbol por TV abierta hasta que se arregle el conflicto, con lo cual la mayoría de los televidentes de la TV de cable quedaron fuera de juego.

Conocer cifras del negocio es imposible, pues existen severas cláusulas de confidencialidad que impiden conocer los verdaderos valores que se juegan tras las pantallas. Sin embargo, es fácil deducir que el retiro de CNT y las otras dos cableras haría tambalear el presupuesto de Goltv para completar alrededor de 28 millones de dólares que deberán ser entregados a LigaPro.

Mientras tanto, medio millón de suscriptores se vieron perjudicados este fin de semana por el conflicto instalado por la intransigencia de Goltv. No hay vueltas que darle. O el problema se arregla o el descalabro acecha al fútbol ecuatoriano. (O)