El secreto de entrevista en Bolívar y San Martín en Guayaquil

200 años. Hoy el Puerto Principal celebra su bicentenario de independencia de la corona española que la convirtió en la primera ciudad del país en obtener su libertad.

Para sellar el futuro de la Provincia Libre de Guayaquil y la independencia sudamericana, los libertadores de América del Sur: Simón Bolívar y José San Martín se encontraron en la Perla del Pacífico, el 26 y 27 julio de 1822, dicen algunos historiadores. De ese hecho histórico queda el monumento a la Entrevista de Guayaquil en el malecón, a orillas del río Guayas. Es de bronce y muestra a los dos héroes estrechándose las manos.

Sin embargo, esa versión sobre los motivos de esa reunión entre ambos libertadores fue desmentida por el historiador colombiano,  Armando Martínez, en 2013. Él encontró en el Archivo Nacional del Ecuador, que está en Quito, una carta escrita por el general José Gabriel Pérez, quien era secretario general de Bolívar.

Según el historiador, Bolívar le ordenó a Pérez escribir esa misiva a Antonio José de Sucre con el resumen de la entrevista entre los dos próceres del sur del continente.

Esa carta, que estuvo perdida por casi dos siglos porque fue mal archivada, señala que la reunión fue cordial. No discutieron sobre si Guayaquil debía ser independiente o anexarse a Colombia, sino sobre el futuro de Perú.

San Martín y Bolívar estuvieron en desacuerdo sobre el tipo de gobierno para el Perú independiente. San Martín se lamentó de sus compañeros de armas que lo habían abandonado en Lima. El Padre de la Patria argentina dijo que se retiraría a Mendoza y que renunciaba al Protectorado de Lima y a la reelección. También que  se retiraría del mando militar sin esperar el fin de la guerra. Además, que dejaría las bases del gobierno, “que no debía ser democrático porque en el Perú no conviene y que debería venir de Europa un príncipe solo y aislado a mandar”.

Según Martínez, Bolívar defendió la democracia y dijo que ni América ni a Colombia le convenía introducir príncipes europeos, ajenos a las masas.

San Martín ofreció toda su ayuda y esperaba que Colombia hiciera lo mismo con Perú. Dejó claro que ese encuentro no oficial y sin ningún objetivo político y militar.

Pero Bolívar entendió que el Libertador de Argentina, Chile y Perú no tenía ni las fuerzas ni el apoyo militar para la victoria final sobre los españoles, que contaban autoridad en el virreinato más rico y una aristocracia opuesta a la república. Bolívar decidió reclutar 4.000 nuevos hombres que se unieron al ejército de 5.000 que había llevado para ir al alto Perú. Dos años más tarde terminó la guerra contra los españoles.

Ese es el secreto de la entrevista en Guayaquil.