Ha sido un proceso de meses: revisión de requisitos, parámetros y regulaciones que finalmente tiene una meta definida: el arroz ecuatoriano llegará a Colombia, con un total de 54.399 toneladas métricas. No se trata de una primera vez, incluso en este año se convierte en una segunda etapa de exportación.

Gracias a un vigente Memorando de Entendimiento con Colombia, el cupo anual de exportación hacia el país del norte es de 95.494 toneladas. El Ministerio de Agricultura y Ganadería definió los porcentajes de exportación para las empresas interesadas en importar el grano desde Ecuador y que participaron en la convocatoria 

Pero este no es el único paso para el arroz ecuatoriano. El Ministerio de Agricultura lleva adelante otra iniciativa que es la de que el grano llegue al mercado europeo. Existe un cupo anual ya establecido que es de 5 mil toneladas y para ello se ha trabajado en que se cumplan las especificaciones técnicas para la exportación, entre ellas, que el producto cuente con valor agregado, como una producción orgánica, con certificaciones internacionales como Global GAP y que maneje un comercio justo.

En tal virtud, le corresponde a los productores e industriales  cumplir las metas requeridas para el logro del objetivo trazado. La región Litoral y el Ecuador, en general, es uno de los mayores beneficiados con estas acciones que propenden a fortalecer la diversificación de productos de exportación. y no solo eso, también está en juego la búsqueda de mercados nuevos que sean el puerto seguro de la producción nacional.

Acciones como estas consiguen que la producción agrícola se convierta  en el eje de la economía nacional. que Ecuador no solo dependan de dos o tres rubros, sino que  amplíe su oferta; para eso es necesario que las acciones público-privadas trabajen en forma armónica. Las ventajas de abrir nuevos mercados harán que el productor ecuatoriano mejore su economía y los ingresos de divisas sean la base para una efectiva reactivación. (O)