Correa recorrió las zonas afectadas por las lluvias en Manabí
El primer mandatario, Rafael Correa, visitó este martes varios puntos de Manabí que están bajo el agua por las últimas lluvias y la consecuente crecida de los ríos.
Las últimas precipitaciones afectaron a varios cantones de la provincia, donde hay cientos de damnificados. Los sectores económicos más afectados son la agricultura y el comercio.
La agenda del presidente inició con un sobrevuelo por Jipijapa, Santa Ana, Rocafuerte, Sucre y Portoviejo.
Al mediodía recorrió las calles de Santa Ana, escuchó las necesidades de los habitantes, conoció de primera mano la situación y constató los daños que ha dejado el invierno. Las calles del cantón están llenas de lodo, las alcantarillas desbordadas y las casas anegadas.
La titular de la Secretaría de Gestión de Riesgos, Susana Dueñas, reportó al Jefe de Estado las acciones de respuesta ante las inundaciones.
Más temprano, el presidente señaló que la situación en la provincia es grave. "Lluvias superan las del fenómeno de El Niño de 1998, más terreno débil, nuevas quebradas e hidrología por terremoto del 16 de abril", comentó en su cuenta en Twitter.
Informó que más de 7.000 hectáreas se han visto afectadas por las lluvias. "Gracias a Dios no hay muertes que lamentar, pero sí muchas familias que lo han perdido todo", indicó Correa.
El gobernante finalizó su mensaje en redes recordando que "en los últimos 24 meses la naturaleza no nos ha dado tregua, pero saldremos adelante. Nadie está solo". (I)
Estamos en Manabí. Situación grave. Lluvias superan las del fenómeno de El Niño de 1998, más terreno débil, nuevas quebradas e hidrología...
— Rafael Correa (@MashiRafael) 11 de abril de 2017
...por terremoto del 16 de abril. Más de 7000 ha afectadas en últimos días. Gracias a Dios, no hay muertes que lamentar, pero sí muchas...
— Rafael Correa (@MashiRafael) 11 de abril de 2017
...familias que lo han perdido todo.
— Rafael Correa (@MashiRafael) 11 de abril de 2017
En los últimos 24 meses, la naturaleza no nos ha dado tregua, pero saldremos adelante.
Nadie está solo.