Las confederaciones Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin) y de Trabajadores del Ecuador (CTE) expresaron ayer su apoyo a la  explotación de los campos petroleros que hay en el parque  Yasuní.

Así lo demostraron los presidentes de ambas organizaciones, quienes quieren ser veedores de las operaciones para certificar que éstas se  realicen de manera técnica.

Santos Villamar, presidente de la Fenocin, afirmó que la organización respalda la decisión del gobierno y propone un plan para que con  “la asignación de los recursos se cree un cerco social para la preservación del parque Yasuní y otras reservas, así como el desarrollo de los pueblos de la región y crear condiciones para la implementación efectiva del Buen Vivir rural”.

De concretarse una  consulta, Fenocin y CTE analizarán antes de tomar una postura al respectoEsas iniciativas, según Franklin Columba, representante de asuntos políticos de la Fenocin, será  propuesta  hoy al  vicepresidente Jorge Glas y el viernes al presidente Rafael Correa. “El presidente debe revisar las estrategias y alternativas de afectación del uno por  1.000 y que en un futuro no se explote más de ello”, indicó.

La Fenocin tiene dos ramas amazónicas: Federación de organizaciones campesinas de la Amazonía (Focao) y Asociación de campesinos y organizaciones campesinas de la Amazonía (Acocsa) que, según Columba, “estarían de acuerdo, siempre y cuando no se afecte a los pueblos no contactados de la zona”. Ambos agrupaciones tendrían entre 3.000 y 4.000 miembros.

Columba quiere que “se busque el mejor mecanismo y tecnología para no afectar”. Sobre los grupos no contactados espera los informes de los ministerios.

Édgar Sarango, presidente de la CTE, compartió este criterio. La entidad, que está conformada por 33 dirigentes nacionales, dijo  que el “aprovechamiento hoy en día  requiere de la más alta voluntad política para que en primer lugar la explotación sea soberanamente técnica y con tecnología de punta”.

Para él la “explotación debería ser  ecológicamente sustentable y el capital generado del mismo atender equitativamente con planes y programas sostenibles en salud, alimentación, vialidad, cultura, deportes, pesca, acuacultura, ciencia y tecnología”.

Sarango y Columba manifestaron que en el caso de que se llegue a concretar una consulta popular ellos analizarán la situación, antes de pronunciarse.                    

En las próximas semanas, la CTE se reunirá con los representantes de la Federación Unitaria de Trabajadores (FUT), la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Clasistas Unitarias de Trabajadores Cedocut) y la  Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Sindicales Libres (Ceosl).

Marcha con incidentes

En Quito, la marcha convocada por simpatizantes de la Confederación de Pueblos y Nacionalidades Kichwas del Ecuador (Ecuarunari), Confederación de nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) y Pachakutik en contra de la explotación, terminó en disturbios.

Los manifestantes partieron de la Universidad Central y el parque El Arbolito y se dirigieron hacia el Palacio de Carondelet. Sin embargo, antes de ingresar a la Plaza Grande se encontraron con un cerco policial, por lo que se registraron enfrentamientos. Según testigos, los gendarmes arrojaron gases lacrimógenos para intentar dispersar a los manifestantes. Los primeros reportes son de varios heridos.

Tras la marcha fueron detenidos el vicepresidente de la Ecuarunari, Marco Guatemal, y 3 personas más de la organización.

Debate en la Asamblea

En la Asamblea Nacional está previsto que su titular, Gabriela Rivadeneira, convoque para mañana al  Consejo de Administración Legislativa (CAL) para analizar el pedido fundamentado del presidente para declarar de interés nacional a los Bloques 31 y 43, que están en el parque Yasuní.   

En esa cita, el CAL asignará a alguna comisión legislativa el tratamiento del pedido, que será similar al de un proyecto legal. Hasta tanto, Rivadeneira ordenó distribuir entre los parlamentarios la solicitud remitida por  Correa.

Los legisladores deben analizar los informes técnicos remitidos por los ministerios de Justicia, Recursos Naturales no Renovables, Coordinador de Política Económica y del Ambiente, los cuales justifican las razones económicas, políticas, ambientales y de impacto social para explotar los bloques del Yasuní.

Reacción de Correa

Desde Guayaquil, el Primer Mandatario volvió a referirse al tema, durante la inauguración de un complejo judicial. “Nosotros debatimos  por el Yasuní, mientras en otros países se debate para lograr la educación gratuita, nosotros  eso ya  tenemos. Eso es bueno”, destacó el gobernante.

Sobre una eventual consulta popular, denunció que hay políticos que “buscan tomar partida en este tema para ver si salen del sepulcro donde los sepultó el pueblo ecuatoriano”.

“Los que contaminan nos quieren dar clases de cómo preservar la naturaleza. Cuánta doble moral. El país está perdiendo dinero con cada instante que pase con un niño sin estudiar, eso no puede esperar más”, reiteró. El jefe de Estado criticó que la contaminación de los ricos tenga efectos globales, mientras que la de los pobres solo a nivel local.

“ Todo es cuestión de hipocresía. Los que hoy reclaman, cuánto aportaron al Yasuní, el resto es hipocresía. No seré yo quien sacrifique a los niños y a nuestra patria, no seremos tontos útiles”, expresó.

ECUARUNARI REÚNE A MIL PERSONAS

Alrededor de mil personas participaron ayer de la marcha convocada por la Ecuarunari, cuyo objetivo fue reclamar al Gobierno el cierre de las escuelas comunales y la posible explotación petrolera en el Yasuní.    

Campesinos e indígenas que llegaron desde varias parte de la provincia del Azuay y Cañar se reunieron desde la mañana en la plaza de San Roque para caminar hasta  la Gobernación del Azuay y luego a la  Dirección de Educación.

Carlos Pérez Guartambel, presidente de la Ecuarunari, manifestó que  “estamos marchando en defensa de la educación bilingüe, la cual está siendo amenazada en sus derechos; queremos que no se cierren los seguros campesinos y que la decisión de explotar el Yasuní ITT la tome la gente, a través de la consulta popular”.

El gobernador de la provincia,  Humberto Cordero, aseguró que la marcha no tuvo los permisos necesarios, pero para Pérez los espacios públicos pertenecen a los ciudadanos.

El ex asambleísta constituyente Fernando Vega participó en la protesta.  “Tenemos que respetar los derechos colectivos de los pueblos, pero lamentablemente la única verdad que se puede decir en el Ecuador se decide desde Carondelet”, criticó.

Vega aseguró que cuando militaba en Alianza PAIS, en 2008, “todos hacíamos fuerzas para que no se explotase el Yasuní. Los que se apartan de las políticas trazadas y cambian su discurso son ellos, no nosotros”. Los manifestantes entregaron hojas volantes con críticas al Gobierno.

EN 2007 ACOSTA APOYÓ TRABAJOS EN LA RESERVA

Cuando Alberto Acosta fue ministro de Energía, durante el primer gobierno de Rafael Correa, comprometió, en 2007, las reservas de crudo con Venezuela.

Acosta avaló el proyecto integrado para la exploración y explotación de crudos pesados de los campos ITT (Ishpingo, Tambococha, Tiputini) que están en el parque Yasuní.

El acuerdo suscrito entre Ecuador y Venezuela, el 17 de abril de 2007 en la ciudad de Porlamar, en el país caribeño, establecía también la participación ecuatoriana en la Faja del Orinoco y el desarrollo de un complejo de refinación e industria petroquímica básica asociada en la costa del Pacífico ecuatoriana, lo que después sería la Refinería del Pacífico, en Manta.

Estos puntos constan en el “Acuerdo para la Instrumentación de la Cooperación en el Sector Energético entre el Ministerio del Poder Popular para la Energía y Petróleo de la República bolivariana de Venezuela y el Ministerio de Energía y Minas de la República del Ecuador”. Esta última entidad estaba a cargo de Acosta.

Él dejó el puesto para ser candidato a asambleísta constituyente y posteriormente presidió ese organismo colegiado. Acosta actualmente apoya una consulta popular para que el pueblo ecuatoriano decida si se explotan o no las reservas petroleras que hay en el parque Yasuní. Andes