Con el objetivo de que  presenten sus ofertas para la fabricación de las cocinas de inducción, ayer en Quito las autoridades de los ministerios de Industrias y Electricidad mantuvieron una reunión de trabajo con los representantes de las empresas de línea blanca que participarán en la fabricación de estos artefactos en reemplazo de los que requieren de gas licuado de petróleo (GLP).

Para el proceso de cambio que se cumplirá desde agosto, como lo anunció el Presidente de la República, el Ministerio de Industrias prepara un reglamento técnico con todos los elementos que el Gobierno quiere que tengan los nuevos electrodomésticos que serán vendidos al público, según lo informó el subsecretario de Desarrollo Industrial, Alexis Valencia.

Hasta junio de 2016 deberán estar cambiadas las  3 millones de cocinas a gas que hay en el país.Además, el funcionario indicó que se busca dar facilidades para la importación del material que se requiere para el ensamblaje, de modo que  se  creará una subpartida arancelaria para el ingreso de los kits. “El punto es crear una subpartida arancelaria para un producto desarmado que se lo conoce como CKD (kit de ensamblaje)”, sostuvo Valencia.

Durante la reunión, el Subsecretario indicó  que el  precio referencial que se tiene hasta el momento para que el producto llegue al consumidor  es 153 dólares para las cocinas de dos zonas de cocción (quemadores), 245 dólares para las de tres; y, 252 dólares para las de cuatro. Reiteró que  “desde agosto las cocinas ya deben estar en percha”.

Carlos Dávila, representante del Ministerio de Electricidad,  informó que el proceso de cambio de voltaje de 110 a 220 voltios en las viviendas se ha cumplido  a nivel nacional, y que al momento se  ha realizado en 1 millón de hogares, de los cuales 800.000 están divididos entre Quito, Guayaquil y Cuenca, mientras que los 200.000 están repartidos en el resto del país.

Los representantes del sector de electrodomésticos sostuvieron que están preparados para producir las cocinas que requiere el país.