Las cuentas de dinero electrónico operadas por el Banco Central del Ecuador (BCE) quedaron inhabilitadas desde ayer.

Durante este mes, el BCE, en conjunto con los macroagentes que participaron del sistema de este medio de pago realizarán procesos internos que permitirán el cierre definitivo del proyecto, informó el BCE.

Los usuarios que no vaciaron sus cuentas, podrán solicitar la devolución de su saldo a través del Balcón de Servicios del BCE en Quito, Guayaquil y Cuenca a partir del 1 de mayo.

Según la Disposición General Sexta del Código Orgánico Monetario y Financiero, los pasivos y saldos que hubieren permanecido inmovilizados podrán ser devueltos durante los próximos cinco años, contados a partir de la última transacción realizada, si suman hasta el 25% del  Salario Básico Unificado vigente ($ 96,50 para 2018).

Mientras que si los montos superan ese porcentaje, el plazo para solicitar la devolución de los recursos se extenderá hasta 10 años.

“El BCE asegura que dichos recursos se encuentran totalmente resguardados”, cita un comunicado.

Una vez transcurridos los plazos, el dinero no retirado  será transferido a la Cuenta Única del Tesoro Nacional, con excepción del dinero inmovilizado por decisiones de carácter legal o judicial.

Al 23 de marzo, $ 11,2 millones estaban guardados en las cuentas de dinero electrónico todavía activas, según el  Boletín Monetario Semanal #581 del BCE.

El cierre de cuentas es parte de la Ley de Reactivación Económica aprobada en diciembre de 2017, que estipula que este medio de pago sea operado por la banca pública, privada y cooperativas.

Estaba previsto que el proyecto de la banca privada, denominado Bimo, funcione desde este mes, sin embargo todavía no hay fecha específica para ello.

En febrero, el director ejecutivo de la Asociación de Bancos Privados, Julio José Prado, indicó que se empezará con pagos mínimos de persona a persona a través del teléfono celular sin importar la entidad financiera a la que pertenezca el usuario. (I)