“Imaginaba que la Media Maratón de Asunción (Paraguay) se iba a correr en un terreno completamente plano. Pero cuando llegué, me sorprendí por las irregularidades que vi en el terreno, principalmente en el malecón de la ciudad.

Corrí los 21,1 kilómetros que contempla la prueba y realmente me quedé sorprendido al ver que en el malecón de esa ciudad paraguaya había pendientes muy altas que me complicaron un poco la participación en el Sudamericano.

A pesar de que me percaté de esas irregularidades un día antes del evento, yo ya había salido decidido desde Ecuador con la mentalidad de hacer un gran papel en mi primer ‘test’ internacional en pruebas de larga distancia.

Mi principal objetivo este año es llegar a octubre en mis mejores condiciones a correr en la Maratón de Chicago (Estados Unidos). De esa manera comenzaré mi participación con miras a los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro 2016.

Desde febrero empecé con el proceso de correr maratones. Fue después de haber superado mi lesión en los Juegos Bolivarianos. Por eso, mi expectativa en esta media maratón era tal, porque sabía que un triunfo sería una señal de que voy por el camino correcto.

Antes de mi actuación aumenté semanalmente algunos kilómetros a mis entrenamientos. Por ese esfuerzo físico perdí peso, pero lo importante es que el sacrificio resultó.

Mi estadía en Paraguay fue cómoda, aunque la verdad, la pista no fue como muchos me habían dicho. Pensaba que en Asunción era plano, pero no fue así. Encontré muchas pendientes que por momentos complicaron la carrera.

Cuando llegamos, el viernes por la madrugada, el equipo estaba cansado, por lo que al siguiente día nos dedicamos a dormir y a recuperar el sueño perdido. Solo en la noche realizamos estiramientos.

El día de la carrera se hizo un recorrido previo para conocer la ruta. Fue en ese momento que, junto con mis compañeros, quedamos admirados por las irregularidades de la calle donde íbamos a correr. Sin embargo, y como buen azuayo (sonríe), las lomas no me afectaron.

Considero que la prueba fue bastante reñida, en especial con un brasileño (Marcelo Parras) que es bueno en estas medias maratones, porque él, al igual que otros corredores, entrena en Europa. Otros, además, hacen cross country. Por eso es que la competencia fue difícil para mí.

En lo personal corrí a buen ritmo y no perdí velocidad. Lo importante es que ahora, que estoy enfocado en correr la maratón para ir a Río 2016, no dejo de lado los ensayos en pruebas de 5.000 y 10.000 metros.

Y es que gracias a la pista puedo trabajar mi velocidad y eso es importante en carreras largas.

Antes priorizaba las competencias en pista, ahora, digo con orgullo que es todo lo contrario, porque mi principal objetivo es la maratón en los JJ.OO.; allá apunto, para estar dentro de 2 años.

“Soy consciente de que debo hacer un tiempo de 2 horas y 18 minutos para ir a Río 2016, donde haré mi tarea pendiente en olimpiadas, cosa que no pude en Atenas 2004, Pekín 2008 y Londres 2012”.