Armonía exacta entre juventud y experiencia,  y un esquema técnico que tiene la firma del profesional ecuatoriano Carlos Sevilla, que ha logrado en un año de trabajo darle identidad al plantel -que el año pasado sufrió la salida de Narciso Mina y José Ayoví- con un buen toque de balón, son los factores que han  llevado al Independiente del Valle a ser el líder en solitario del torneo ecuatoriano de balompié. Suma 18 puntos (+4).

En tres años de militancia en la primera “A”, el club ha logrado lo que se ha propuesto. Inicialmente la meta era no descender y así lo hizo. Esta temporada, según el adiestrador, el objetivo es pelear entre los primeros lugares y en lo posible acceder a un certamen internacional, para que el plantel adquiera roce en otros eventos fuera de las fronteras.

El  adiestrador de 61 años, que ha dirigido a los principales equipos del torneo nacional, ayer conversó de una forma diferente con sus pupilos. Su idea es mentalizarlos para que el liderato no los envanezca y por el contrario continúen con la sencillez en el trabajo diario y conscientes de que el crecimiento puede mantenerse. Sobre sus expectativas con el club, Sevilla dialogó con FANÁTICO, luego de la práctica que ayer cumplió el equipo en su complejo de alto rendimiento, ubicado a 5 km de Sangolquí.

¿Estaba planificado ser puntero del certamen?

Realmente no, pero ahora que estamos al frente de la tabla tenemos un compromiso mayor con el trabajo y en los objetivos que nos trazamos a inicio de temporada. Debemos mantener la misma línea de conducta.
¿Es casualidad que el equipo esté en la cima? 
Para nada, esto se debe al esfuerzo y al trabajo que a diario hacemos en conjunto con los dirigentes (Michel Deller, Santiago Morales y Óscar Lara) que son los puntales del equipo en esta institución y al respaldo que hemos tenido desde que llegamos (19 de abril 2011). Además, tenemos un grupo  humano con toda la predisposición para crecer, aprender y mejorar. Todo eso hace que la tarea que cumplimos como cuerpo técnico sea más fácil.

¿Cómo logró combinar armónicamente juventud y experiencia?

Cuando elegimos a los jugadores lo hicimos con mucho cuidado, apegados al presupuesto real del club y tratando de escoger  lo que podíamos. Con los extranjeros también se analizó mucho y vemos que no nos equivocamos;  la prueba es que hoy tenemos  un grupo de jugadores que se preocupa  por sumar en beneficio del plantel, sin ser individualistas.

¿Independiente es una familia?

Es un grupo homogéneo con objetivos muy definidos, en el que cada uno apoya  esa consecución y en la medida de su comportamiento dentro y fuera de la cancha se va marcando y ganando un puesto en el elenco titular.

¿Qué diferencia al cuadro de Sangolquí de los otros equipos que dirigió?

Este es un equipo distinto porque acá la estructura es diferente por la filosofía de los dirigentes  que desean hacer de este uno de los grandes equipos de fútbol ecuatoriano, pero con formación propia de sus jugadores jóvenes, cuya meta fundamental es salir a otros equipos del balompié local o internacional. Yo sé de esos ideales y trato de inyectárselos al máximo consiguiendo los objetivos a mediano y largo plazo.

¿Cuál es el objetivo del 2012?

Cuando armamos el equipo el propósito era estar en media tabla disputando la posibilidad de entrar en los primeros lugares e intentando acceder para el próximo año a un torneo internacional. Pero estamos muy conscientes de que hay equipos en el fútbol ecuatoriano que tienen una sólida estructura y un respaldo económico bastante grande que son los llamados a pelear por el título y a ellos esperamos hacerles dura pelea  a lo largo de la competencia.

¿Cuál es la ventaja mayor del Independiente?

Tenemos el privilegio  de trabajar sin presiones de ninguna índole y creemos que aún podemos mejorar el rendimiento del equipo, que todavía no llega a su máximo potencial y puede dar más con el transcurso de las fechas y con un respaldo de la hinchada que está creciendo. Se está trabajando para fomentar en los niños el apego hacia esta divisa.