Las Factos se dividen entre el karate y el patinaje de carreras
Está convencida de que el próximo año se convertirá en la primera ecuatoriana en convertirse en campeona mundial de karate. Esa es la meta que la impulsa a llegar con más motivación a su entrenamiento diario y lo revela en su rostro y en su expresión verbal.
Los ojos cafés de Jacqueline Factos se iluminan con intensidad cada vez que se refiere a su ocupación, que a la vez es su pasión. A sus 24 años forma parte de los tres integrantes de este deporte que representarán al país en los Juegos Panamericanos de Guadalajara (México) el próximo mes.
Para perfeccionar su nivel, de momento entrena con la selección de Holanda en ese país europeo. Retornará a mediados del próximo mes para hacer nuevas maletas y emprender el viaje a Centroamérica.
“Me levanto todos los días a entrenar entre 4 y 6 horas no para ser segunda o tercera, voy a ser primera, lo llevo en el corazón”, refiere con entusiasmo la karateca que a los 18 años recién incursión en esta disciplina.
Antes practicaba patinaje junto a su hermana menor, Ingrid, que aún interviene en competencias de carreras, “pero la verdad no tenía muchas condiciones y un día pasé por el dojo y me agradó el combate. Por haber sido deportista tenía físico. La técnica la aprendí con mucha facilidad”, recuerda la karateca colombo-ecuatoriana.
Jacqueline nació en Quito y vivió 10 años en Colombia, aunque disimula muy bien ese acento “cafetero” y pasa sin problema como una compatriota más.
La falta de apoyo deportivo la obligó a regresar a Ecuador. Aquí consiguió la consagración. Es campeona nacional, vicecampeona iberoamericana y tercera en el Campeonato Mundial de Francia.
Su mayor aventura deportiva la vivió el año anterior en China donde viajó en representación del continente americano. “Fue la mejor experiencia, porque compartí con los campeones mundiales de cada una de las artes marciales”.
Por eso superó sin problema la rotura de su mandíbula y la pérdida de tres dientes en un entrenamiento en Holanda. Una acción desafortunada de su compañero generó el percance que la apartó por cuatro meses del dojo.
Pensó incluso que no retornaría a la competencia, pero, tras su recuperación, en la primera pelea que realizó perdió el miedo y los combates continuaron. “Todo lo que no me ha vencido me ha dado más fuerza para seguir adelante”.
Vive distante de sus padres pero muy cerca de su hermana Ingrid. Gracias a sus logros deportivos tiene la comodidad necesaria para dedicarse por completo al karate. Incluso, pudo concluir su licenciatura en Cultura Física.
Esporádicamente da clases de defensa personal en un gimnasio. Pese a que los fines de semana no puede dedicarse a las actividades propias de su edad como las fiestas, está feliz con la vida que lleva.
“Aunque parezca aburrida mi vida, tengo el lujo de practicar el deporte que me gusta y a la vez sustentarme con eso”.
Cuando puede acude al cine y si no está a dieta prueba los manjares prohibidos: dulces y grasas. Es una experta preparando pollo salteado con verduras, que es el platillo por excelencia en su menú diario, que incluye muy pocas dosis de carbohidratos y pastas.
Tras dos paradas lidera la Premier League en la modalidad de kúmite 55 kg, pues fue bronce en el Open de París y nuevamente tercera en el de Estambul, a falta de un solo tope, el de Salzburgo, Austria, que se efectuará entre el 12 y 13 de noviembre.
Hasta el momento suma 182 puntos, producto de sus dos participaciones en la mencionada liga europea de karate.